El Mallorca arranca un punto en Balaídos que le salva del descenso

Un tanto de Budimir cuando el Mallorca estaba con diez por la expulsión de Raíllo dejó sin premio a un Celta que ya se veía fuera del descenso a costa de los bermellones. Rafinha y Aspas, de penalti, pusieron dos veces por delante a los gallegos pero Salva Sevilla, también con una pena máxima, y el postrero gol del delantero bosnio mantienen a los celestes en la zona roja y al cuadro balear marcando la salvación. Primer punto fuera de casa de los de Vicente Moreno.

No le tembló el pulso a Òscar Garcia para cargarse del once a Hugo Mallo y Santi Mina y dar paso a un 4-2-3-1 con peloteros como Brais y Rafinha. Ese esquema le dio la victoria en La Cerámica ante el Villarreal hace unas fechas y no empezaron nada mal sus pupilos ante el Mallorca, siendo claros dominadores del cuero ante un cuadro bermellón desubicado. Un claro ejemplo fue Lumor, que en un despiste en el área casi le cuesta un disgusto por la presión de Rafinha. Sin embargo, el ex del Barça sí pudo celebrar su primer tanto en su segunda etapa como celeste cuando en el minuto 20 Olaza le hizo un regalo en forma de centro que el hispano-brasileño cabeceó de manera inapelable.

Se le ponían las cosas de cara al conjunto gallego, pero Aidoo hizo saltar por los aires su plan. Un inocente pisotón sobre Budimir en un saque de banda sin peligro alguno fue castigado con penalti por un De Burgos Bengoetxea que necesitó acudir al monitor del VAR. Salva Sevilla ajustó bien la mirilla desde los once metros e igualó el duelo. Este tanto hizo daño al Celta, que no se repuso hasta los últimos instantes del primer acto. Olaza, muy incisivo por banda izquierda, asistió a Brais pero el de Mos no impactó bien su volea.

Vicente Moreno movió ficha y dio entrada al Cucho Hernández por Febas para instaurar un 4-4-2 y evitar los envites celestes. Sin embargo, lo primero que hizo el cafetero fue cometer un penalti sobre Olaza y Aspas no falló desde los once metros. A la hora de juego el técnico bermellón quemó sus naves y introdujo a Lago Júnior en el césped para intentar no irse de vacío. Con más espacios atrás, Lobotka, Aspas y Sisto no lograron transformar una clara ocasión local aunque parecía que no se arrepentirían de malograrla, pues Raíllo fue expulsado poco después y la superioridad numérica debería haber bastado para sellar el triunfo.

Pero en una contra visitante, Lago Júnior puso un centro que la zaga celeste no despejó y Budimir, ratón de área donde los haya como ya demostró en el Camp Nou, estableció las tablas. El Celta achuchó de lo lindo en los últimos compases pero el triunfo se acabó escapando, en parte gracias a un paradón de Reina en el 95' a tiro de Aspas.