Salva Ferrer y un histórico ascenso

Salva Ferrer, un pilar en el proyecto del Spezia

Salva Ferrer, un pilar en el proyecto del Spezia / Spezia Calcio

Albert Gracia

Han pasado 76 años desde que aquellos bomberos de Spezia se hicieron con el ‘Campionato di Divisione nazionale’ en mitad de la II Guerra Mundial. La Federación italiana obvió aquel título hasta el siglo XXI. Un título que acreditaba al Spezia como campeón en un torneo en el que un equipo modesto que había tenido que reclutar a bomberos para confeccionar el equipo hizo caer al gran Torino, aquel conjunto que se convertiría en leyenda.

Este año, el Spezia, que ha pasado por mil penurias, por descensos a Serie C y por fusiones y refundaciones (la última en 2008), vuelve a ser noticia en Italia y por primera vez en su historia logra un ascenso a la Serie A. “Al final, la vida te guarda regalitos si te esfuerzas”. Lo afirma Salva Ferrer a SPORT, un chico de Martorell que en apenas año y medio ha vivido un debut y un descenso con el Nàstic, un traspaso a Italia y un ascenso a la Serie A.

Lo ha logrado con el Spezia, un club de tradición futbolística cuyos aficionados vivían en la eterna esperanza. El equipo entraba en playoff con asiduidad pero nadie esperaba un ascenso. Y menos ahora. Ni los jugadores. “Si me lo preguntas hace cuatro meses no me lo esperaba. Si me lo preguntas hace un par de semanas, tampoco me lo esperaba. Pero dentro de mí y de los compañeros había algo. Sabíamos que no había posibilidad de perder. Teníamos que ganar ese playoff. Y lo logramos”, asegura Salva Ferrer. El lateral ha sido una de las piezas clave de este histórico Spezia. 

Adaptación complicada

Le costó adaptarse y entrar en el equipo pero la exigencia de Vincenzo Italiano, su técnico, valió la pena. Pasó a jugar un fútbol “más italiano” y a partir de noviembre cogió velocidad de crucero. Salva, junto a sus compañeros, dio un puñetazo encima de la mesa para demostrar que este año sí: “Una de las claves del ascenso fue el cambio de mentalidad que tuvimos. De pensar que éramos un equipo flojo a lograr una racha espectacular entre noviembre y febrero. Ahí empezamos a creer en el ascenso. Luego volvimos muy bien de la cuarentena”. Y después llegó el capítulo final a esta bonita historia. 

El Spezia se jugaba el proyecto entero al todo o nada en la final ante el Frosinone. En la ida vencieron 0-1 y en la vuelta tuvieron que sudar sangre para aguantar ese 0-1 en contra que les aupaba a la gloria. Un partido y un playoff que guardará siempre en el recuerdo: “Aguantamos y logramos subir. No nos lo podíamos creer. Ahora la gente nos para por la calle, nos invita, te reciben mejor que nunca… Es bonito todo esto”. 

En unos días dará comienzo la Serie A. En un principio, la idea del club es seguir con la base que logró subir. O al menos así lo intuye Salva: “El club quiere montar el equipo más competitivo posible. Imagino que estarán contentos. Hemos llegado jugando un buen fútbol. Todo ha sido por mérito nuestro”. El técnico, Vincenzo Italiano, de la escuela Sarri, ha tenido mucho que ver. 

El futuro es apasionante para este Spezia y, sobre todo, para Salva Ferrer, que tras su temporadón ha llamado la atención de clubes como Getafe, Fiorentina o Sassuolo y podría ser incluso seleccionable para la Sub-21. Pero el presente no se queda corto. El de Martorell se quedará en Spezia, de momento. Así lo avanzó Mauro Meluso, nuevo director técnico, y confirmó el propio jugador: “Yo tengo contrato. Aquí me siento como en casa. Nunca se sabe porque la carrera de un futbolista es como es y a veces no está ni en tus manos. Pero de momento me quedo”. Será, sin duda, una temporada ‘spezial’.