Seis apuntes para mantener la confianza en el proyecto de Ronald Koeman

Koeman: "El penalti nos ha hecho mucho daño"

Koeman: "El penalti nos ha hecho mucho daño" / FC Barcelona

Juan Manuel Díaz

Juan Manuel Díaz

El barcelonismo vivió con profunda decepción la derrota frente al Real Madrid (1-3) en el clásico. Más allá de la indignación generada por las decisiones arbitrales, la falta de reacción en el césped y en el banquillo -Ronald Koeman no movió ficha hasta el minuto 81- dejó un poso amargo.

Sin embargo, un análisis más reposado del choque permite encontrar una serie de detalles que confirman que, a diferencia del curso pasado, el de Koeman no es un Barça decadente, sino en construcción. 

Nuevo sistema (4-2-3-1), salida de auténticos tótems (Luis SuárezIvan Rakitic), irrupción de nuevos talentos (PedriTrincao), intento de recuperar la mejor versión de Leo Messi tras la crisis del verano y de Coutinho tras el exilio muniqués...

A pesar de estas dificultades, el Barça dejó varios detalles positivos durante la primera hora de juego.

1 Un equipo con más intensidad y ritmo

Desde la llegada de Koeman a la caseta azulgrana el trabajo físico se ha incrementado sesiblemente. Además, las altas y bajas han rejuvenecido un plantel en el que era necesaria savia nueva. Estos dos factores han permitido que el equipo sea más dinámico con el balón y que haya recuperado una circulación más rápida del esferico. También vuelve a realizar la presión alta sin que se parta el equipo. Aunque es cierto que aun no puede mantener esas virtudes todo el partido.

2 La valentía de Koeman: mantuvo la meritocracia

El clásico arrancó sin dos pesos pesados como <strong>Sergi Roberto </strong>y <strong>Antoine Griezmann</strong>Koeman anunció desde el principio que no armaría el equipo a partir de las fechas de nacimiento ni de los currículums, sino del rendimiento partido a partido.

La visita del Real Madrid invitaba a que Ronald fuera más conservador y primara la veteranía, pero por contra el neerlandés prefirió dibujar el once apostando por los futbolistas que considera que están en mejor forma. Una filosofía que conecta con la del ahora seleccionador español Luis Enrique Martínez, por ejemplo.   

3 Los jóvenes demostraron que saben competir

La apuesta del técnico azulgrana funcionó durante muchos minutos del partido. Dest (19 años) ofreció un muy buen nivel hasta el ‘hundimiento’ colectivo de la última media hora, y Pedri (17) no brilló tanto como otros días, pero no porque se amilanara, pues intervino en el juego y dio la cara hasta que fue relevado. El tinerfeño pagó el ‘aislamiento’ del mediapunta de banda derecha.

4 Con la vuelta de Jordi Alba recuperó las bandas

Es cierto que Koeman tiene pendiente encontrar la fórmula para que la banda derecha se equilibre con la izquierda en cuanto a su  rendimiento ofensivo. En este sentido, el regreso de Jordi Alba fue una excelente noticia.

El de l’Hospitalet volvió a ser una de las mejores bazas ofensivas del equipo, y permitió que Dest jugar en su banda, equilibrando el dibujo. En un equipo con los extremos jugando a pie cambiado, los laterales volvieron a explotar sus carriles.

5 Ansu Fati aparece en las grandes citas

Es evidente que el Barça del futuro se debe construir en torno a Fati. El joven delantero (17 años), no solo confirma día a día su talento, sino que además tiene el preciado don del gol, como quedó claro de nuevo ante el Real Madrid -es el Pichichi del equipo. Y, por encima de todo, tiene el aplomo de los veteranos.

No es que Ansu no se viera superado por el clásico. Demostró que se mueve como pez en el agua en las grandes citas, y además jugando esta vez en otra posición, la de delantero centro.

6 Un ecosistema para que vuelva el mejor Leo Messi

Leo progresa adecuadamente. El capitán vivió la pretemporada más atípica y agria de su carrera. A la espera de lo que decida el próximo 30 de junio, quiere pelear un curso más por la camiseta de su vida.

Poco a poco va mejorando su tono físico y Ronald intenta construirle un hábitat favorable junto a AnsuCoutinho... Koeman sabe que es un factor clave para que el proyecto frague.