Lewandowski se sintió maltratado por el Bayern

Lewandowski no tiene ninguna intención de dar marcha atrás. El polaco cree que, a sus casi 34 años, es el momento de un último reto. En Alemania lo ha hecho todo: Ha ganado 10 Bundesligas, ha roto moldes como goleador. Necesita otra motivación y la oferta del Barça es ideal para ello. El foco mediático de la Liga, los clásicos, el desafío de devolver al cuadro barcelonista a lo más alto. Pero eso no significa que el Bayern no haya intentado todo para convencerlo.

Hace meses que Robert decidió empezar a escuchar ofertas. Cuando sondeó a la cúpula de su actual club y vio dudas, se sintió maltratado. Después de todo lo que ha dado a lo largo de estos ocho años, superándose a si mismo sin parar, creía que merecía más respeto y consideración. Las primeras conversaciones, que apuntaban a una oferta de no más de una temporada, no fueron positivas. Tampoco lo fue ver cómo salían informaciones respecto al sondeo de mercado en busca de un '9' joven de futuro (Haaland, sin ir más lejos).

LA REUNIÓN EN MALLORCA, CLAVE PARA DEJAR TODO CLARO

Poco a poco algo se fue rompiendo hasta el punto de que Pini Zahavi empezó a tratar de forma informal con Laporta, amigo desde hace tiempo, la posibilidad que ahora suena con tanta fuerza. Eso fue en marzo. El Bayern intentó reconducir la situación, prometió al polaco un equipo para ser candidato absoluto a la Champions. Y, en ese sentido, lo está haciendo. La última incorporación de Mané, las de Mazraoui y Gravenberch. Y las que puedan llegar. Una plantilla TOP.

Pero Lewandowski dejó claro en la última reunión en Mallorca a Salihamidzic, Kahn y compañía que no hay posibilidad de vuelta atrás ni de reconsiderar nada. La decisión está tomada y él ha hecho todo lo que ha podido para activarla. Ahora es cosa de Bayern y Barça.