Riqui Puig, ¿ahora sí?

El recital de Riqui Puig ante el Andorra

 Riqui Puig fue el mejor del Barça ante el Andorra y recibió, un domingo más, varios recados de sus rivales / Rubén Moreno

Ivan San Antonio

Ivan San Antonio

Solo tiene 20 años, no alcanza el metro setenta y pesa 56 kilos, pero esto es fútbol y en el fútbol manda el talento. Ni la edad, ni el peso. Tampoco la altura. El deporte más democrático del mundo lo es porque acepta cualquier complexión física mientras haya calidad cuando llega el balón. El Barça lo entendió mucho antes que sus rivales y, gracias a ello, el Camp Nou ha disfrutado de Guardiola, Xavi, Iniesta, Busquets o Messi. La afición culé pide ahora seguir divirtiéndose con Riqui Puig, heredero de todos ellos. El Barça no puede permitirse el error histórico que supondría frenar su talento.

EL AVAL DE KLUIVERT

El máximo responsable del fútbol formativo anima a quienes tienen la última palabra a ser valientes: “Si hay un hueco abierto, Riqui tiene que ser el primero en subir”, aseguraba el sábado desde Abu Dhabi, donde se ha celebrado la Liga Promises. Sus palabras tiene un gran valor porque no hace tanto recomendó al canterano seguir creciendo a través de una cesión, algo que no entra en sus planes.

LOS PLANES DEL BARÇA

SPORT ya explicó en octubre que no había, pese a alguna insinuación desde el propio club, ninguna posibilidad de que deje el Barça en enero. No entra en los planes del centrocampista, cuya confianza en su fútbol es total y está convencido de saber aprovechar las oportunidades que lleguen desde el Camp Nou. “Siempre he dicho que me quiero quedar”, confirmó a inicios del mes de diciembre. La única duda es saber qué planes tiene el Barça para él.

Carles Aleñá se ha ido al Betis, los problemas de Arthur Melo convierten al brasileño en un jugador poco fiable y Arturo Vidal quiere irse a Italia. El cierre del mercado invernal permitirá a Valverde saber con qué piezas puede contar en la medular para luchar por todos los títulos. 

SIN NOTICIAS

El de Matadepera demostró en verano y en el amistoso en Cartagena que está listo para entrar en escena. Sus apariciones en el primer equipo han convencido al barcelonismo de que merece más, pero quien decide es Valverde. Riqui Puig no ha recibido noticias de que nada vaya a cambiar. Tampoco las espera. Sigue entrenándose sin hacer ruido y preparándose para todo, aunque es consciente de que “las oportunidades arriba están muy caras”, tal y como expresó hace pocas semanas.

Sus opciones pasan por un cambio importante en la nómina de centrocampistas o por un gesto valiente por parte de Ernesto Valverde apostando por él. Todo puede pasar, aunque ciertas circunstancias juegan en su contra. El Barça juega esta temporada en la Copa, torneo en el que la cantera suele tener su cuota de protagonismo, una eliminatoria menos y, además, se disputa a partido único. Nada hará bajar los brazos a Riqui Puig, que esperará paciente su momento para, cuando llegue, aferrarse a él.