Òscar: adiós a las gaviotas

Òscar García dejó de ser ayer entrenador del Brighton, tras acordar con el club la rescisión del contrato que le unía por otra temporada en una decisión que tomó hace ya varias semanas pero que no comunicó hasta el mismo domingo, tras la derrota en Derby y que apartó al equipo de la lucha por ascender a la Premier League.

El catalán llevaba meses planteándose su salida por sus diferencias de criterio con la dirección del club, que no cumplió con las promesas de reforzar la plantilla y que, más aún, la debilitó con los traspasos durante la temporada de Bridcutt al Sunderland y Barnes al Burnley, sin ocupar su plaza, además de las lesiones de jugadores clave... Y que le empujaron a dar la alternativa a jóvenes como Forster-Caskey o March en el primer equipo.

“Estoy orgulloso del equipo, de su entrega, trabajo y de lo conseguido” aseveró Òscar, quien con un presupuesto muy limitado fue capaz de colocar al equipo en play-off y por encima de clubs con mayor potencial como Leeds, Forest, Middlesbrough, Blackburn, Bolton, Ipswich o Charlton.

El entrenador, que se despidió de la hinchada a través de una carta abierta en la página web en que agradeció el año vivido, podría continuar el próximo curso en Inglaterra, si bien, fiel a su filosofía, abandonó el Brighton sin querer ligar su futuro con nadie. “A partir de mañana ya podré pensar en ello; antes no”, sentenció.