Solo Lewandowski mantiene el nivel

Robert Lewandowski fue el único delantero del Barça que estuvo a la altura del partido ante el Inter. Solo él sobrevivió a la responsabilidad del duelo. Lewandowski logró lo más difícil: no perder la cordura en los momentos de máxima presión.

Jugó con pausa y demostró acierto. Marcó, como se le exigía en la primera final del curso. Pero al Barça no le bastó la contundencia en las áreas -Ter Stegen y Lewandowski fueron los mejores- para imponerse al Inter.

Tras el partido el polaco no pudo esconder su frustración: teníamos tantas ganas de marcar que nos olvidamos de la defensa, dijo. "Somos un equipo inestable", reconoció. Lewandowski cumplió; marcó dos goles y trató de ordenar un Barça que fue un caos por momentos. Al Barça le está costando encontrar el equilibrio entre control y verticalidad. El perfil de Dembélé y Raphinha, dos jugadores poco cuidados con el balón, obligan al equipo a tener que hacer grandes esfuerzos en el repliegue. Solo el polaco está siendo pulcro con el juego de posesión y rotundo en el área.

Número de jugador top

Lewandowski ya suma 14 goles en 12 partidos. Solo Haaland (20) mejora sus cifras. El ex del Bayern ha marcado en ocho partidos: nueve en LaLiga y cinco en Champions. A sus cifras hay que sumar una carga de minutos importantes: ha sido titular en todos los partidos excepto en el partido ante el Cádiz el pasado 10 de septiembre. Ese día fue suplente pero tuvo tiempo de marcar y dar dos asistencias.

Su influencia va más allá de sus números goleadores. 'Lewy' se ha convertido en un futbolista estructural del equipo. Un delantero que da soluciones al juego y ordena a una delantera con tendencia al desorden. En los últimos encuentros -ante el Inter en Milán y en cada frente al Getafe- había bajado un peldaño, pero ante el Inter recuperó su mejor versión. La madurez que está exhibiendo el polaco contrasta con la inestabilidad del equipo.

Sus dos goles sirvieron para que el Barça pueda seguir creyendo en la posibilidad de un milagro. El conjunto de Xavi necesita ganar al Bayern y al Plzen y que el Inter como mínimo empate sus dos partidos. En caso contrario el conjunto azulgrana jugará la Europa League, una competición que el polaco no disputa desde la temporada 2010-2011 con el Dortmund.