La entrevista

Juan Carlos Unzué: "Tengo la inquietud de entrenar, pero también podría renovar"

Las ganas por aplicar sus conocimientos tácticos podrían llevarle a cerrar en junio su etapa en el staff técnico

Jordi Gil

La portería del FC Barcelona tiene en Juan Carlos Unzué a su director de orquesta desde el 2003. Llegó con Frank Rijkaard y siguió con Pep Guardiola. De ambos afirma que ha aprendido mucho y le han contagiado la pasión por sentarse pronto en el banquillo como primera espada. Un paso que tarde o temprano piensa dar.

Usted vivió como el equipo moría de éxito tras lograr el doblete con Rijkaard, ¿los indicios del conjunto de Pep son muy distintos después del triplete?

La mayoría de jugadores vivieron la experiencia y no quieren repetir. Las comparaciones son odiosas, pero veo circunstancias muy distintas. Hay mucha gente en el entorno que nos repite que el punto de inflexión de aquella época fue el partido de Mónaco contra el Sevilla cuando se perdió por un resultado difícil de digerir. Mi sensación fue que el auténtico punto de inflexión fue el Mundialito de Clubs. Hasta entonces el equipo mantuvo unos niveles de atención altos. Sin embargo, esta derrota nos hizo daño.

¿Con Guardiola su rol en el equipo es parecido al que tenía con Frank?

Es similar. La suerte es que ambos me han dejado ser más cosas que el entrenador de porteros. Ellos vieron mis inquietudes, ambiciones y posibilidades de darles una opinión diferente. A veces se necesita esto. Luego decide el entrenador. Con Frank era quien llevaba la estrategia, marcaba las pautas. Luego la dinámica del juego es parecida, si bien ahora tengo más conocimientos tácticos adquiridos del tiempo de trabajo con Pep. Frank daba cuatro conceptos más básicos y luego sacaba el cien por cien al jugador. Pep es un hombre que da más información en este aspecto.

En más de una ocasión ha dicho que se plantea iniciar la aventura como entrenador la próxima temporada, ¿es definitivo que se marchará en junio?

Es cierto que lo he comentado, pero para nada es algo decidido. Tengo la inquietud de entrenar desde mi época de jugador, me saqué el título para hacerlo, pero me salió la oportunidad de realizar el trabajo como entrenador de porteros, algo que me ha permitido crecer como profesional y persona. Un amigo me decía que en el Barça puedo hacer el mejor master posible y encima me pagan. Esta inquietud se la comunicado a Txiki, que fue quien me trajo en su momento y a Pep, con quien ahora trabajo. Es algo que dependerá mucho de las circunstancias y habrá que ponerlo en la balanza. También hemos tratado de una posible renovación. Acabo en junio y desde el club hay una idea de renovar por un año más, aunque probablemente una cosa no quitará la otra. Aquí aprendo cada día que pasa.

¿Debe costar mucho decirle que 'no' a Pep?

Hay gente que no entiende mis inquietudes. Me dicen que si estoy trabajando en el mejor sitio, que en el Barcelona no está todo el mundo...Soy consciente de esto y de la presión que tendría si empiezo a entrenar. Algunos me dicen que son un poco masoquista por la dificultad que me espera.

Hablando aún de su actual trabajo, ¿cree que Víctor Valdés se encuentra en su mejor momento desde que llegó al Barça?

Su buena línea no viene sólo de este año, pero es cierto que Víctor puede tener ahora más pausa, saber estar, transmitir un poco más de tranquilidad...Ha sido padre, ha firmado una renovación importante y las experiencias que va adquiriendo también cuentan mucho. Es un chico de 27 años, pero lleva más de 300 partidos jugados. Es una barbaridad. El poso de las experiencias hace que tenga este plus o evolución.

¿Se siente parte del éxito de Víctor?

Es muy fácil trabajar con él. Siempre ha tenido condiciones y ganas de triunfar. Muy mal lo tendría que haber hecho para que no fuera adelante. De todos modos, yo no le he influido tanto como sus compañeros. Rustu, en el primer año, Jorquera y Pinto le han ayudado mucho. Seríamos injustos si no les valorase. Además de la competencia, siempre han generado buen ambiente.

Más allá de considerarse, ¿el gran triunfo de Valdés ha sido acabar con el eterno debate de la portería del Barça?

Víctor se ha ganado la confianza y continuidad. Jugar en un equipo grande de portero ya por sí mismo es complicado y en el Barça actual todavía es más difícil. Nuestro tipo de juego le lleva a intervenir poco, a precisar de unas condiciones muy amplias que van más lejos del remate final. Hay que anticiparse a la jugada. En el fondo, el portero del Barça es un jugador más.

De su experiencia como portero, ¿cree que a Víctor le hubiera motivado ir a un Mundial o Eurocopa como suplente?

Fui internacional sub'18, sub'21...pero no llegué a la absoluta y siempre soñé con acudir a un gran torneo. Tenía el deseo vivir la experiencia y después si puedes ser primer portero, mejor que segundo. Ser llamado para un amistoso no es lo mismo que estar en un Mundial o Eurocopa. La experiencia de los últimos campeones fue la leche y el ambiente de un Mundial debe ser fantástico.