Jorginho y los jugadores libres como solución para el Barça

El pivote del Arsenal vuelve a escena por la situación económica del club

Laporta quiere una estrella, pero si no se vende no habrá dinero para fichar

La Posesión 1x03: "Jorginho se pudo haber hecho"

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L. Miguelsanz

L. Miguelsanz

Se viene un verano muy complicado a nivel de mercado en el Barça. Salvo que el club decida vender jugadores titulares al mejor postor para ingresar cantidades millonarias -y siempre que los jugadores quieran- no habrá posibilidad de invertir.

La idea de Joan Laporta es fichar, al menos, un crack e intentar cubrir el resto de incorporaciones con futbolistas a coste cero. Lo del crack es una idea que solo se valorará en el caso de que se consigan traspasos de unos 200 millones de euros, algo que es posible pero que a día de hoy se ve como una quimera. Es por ello que Deco está intentando buscar ya soluciones imaginativas para intentar reforzar al equipo sin que comporten un gasto excesivo.

Ya lo hizo el verano pasado con la incorporación de Gündogan o Iñigo Matrtínez (libres) o los cedidos Cancelo y Joao Félix y ahora deberá lograrlo con el handicap de tener el límite salarial muy controlado. Deco sabe de las dificultades y así se lo dejará claro al entrenador que venga. Habrá fichajes, pero es probable que en este 2024 sean circunstanciales.

Uno de los futbolistas que se valoró para enero por la lesión de Gavi fue Jorginho, del Arsenal, un futbolista que Deco conoce a la perfección y que ha tenido un buen papel en el equipo de Arteta. Termina contrato a finales de temporadas y estaría encantado de firmar por el Barça, un club que ya le quiso hace unos años pero que no pudo competir con el Chelsea para firmarle.

Arsenal - Lens | El gol de Jorginho

TELEFÓNICA

El director deportivo del Barça se había marcado el objetivo de no firmar ya más jugadores de más de 30 años para tener una plantilla equilibrada, pero la necesidad aprieta y este verano puede valer todo o casi todo siempre que se trate de un futbolista de calidad contrastada y que mejore la actual plantilla.

El sueño de Deco pasaba, inicialmente, por mantener a los jugadores titularísimos, vender a los que tienen menos minutos e incorporar, al menos, a un extremo zurdo y un pivote de primer nivel, además de Joao Cancelo. Los números ahora no salen y el pivote elegido (Onana, del Everton) parece que no vendrá porque vale demasiado. A partir de ahí, Deco está intentando encontrar futbolistas que puedan dar un año o dos años de buen rendimiento para esperar tiempos mejores.

El Barça empieza a temer que va a pasar un año de travesía en el desierto a la espera de la inauguración del nuevo Camp Nou que debería permitir la entrada de ingresos importantes que mejoren la actual tesorería. Las cosas están como están y no se esperen grandes operaciones en los próximos meses salvo que los Araujo, De Jong y compañía acepten salir en ventas muy altas que permitan volver a invertir. Es la única palanca que queda para remodelar un equipo que, quizás, necesita comenzar de cero.