De Jong ilumina al Barça hacia los cuartos en Vallecas

Una nueva exhibición del holandés y una reacción a tiempo salvan al cuadro de Koeman en otro partido gris

Messi anotó su 18º gol en 11 partidos contra el Rayo y sigue agrandando su leyenda

Un brillante De Jong conduce al Barça a cuartos de Copa del Rey

RFEF

Sergi Capdevila

Sergi Capdevila

En un Barça de claroscuros (demasiados), la luz de De Jong está siendo, más que eso, un halo de esperanza. El neerlandés, tímido en sus 15 primeros meses y lejos de lo que de él se esperaba, comienza a maravillar. No es el del Ajax, es un futbolista diferente, con personalidad, un llegador fantástico, un 'currante'. Un faro. Su gol y su contagiosa actitud han guiado al equipo azulgrana a los cuartos de final en un duelo gris en Vallecas.

Ficha técnica Rayo-Barça 2021

Liga Santander

1
2
Alineaciones
Rayo Vallecano
Dimitrievski, Fran García, Martos, Saveljich, Catena, Mario Hernández, Andrés Martín (Mario Suárez, 71'), Joni Montiel (Álvaro, 56') , Trejo y Qasmi (Antoñín, 71').
FC Barcelona
Neto; Mingueza, Araujo, Lenglet, Junior (Alba, 68'); Busquets, De Jong, Riqui Puig (Pedri, 68'); Trincao (Dembélé, 68'), Messi y Griezmann (Braithwaite, 85')

Primera mitad sosa, insípida. Poco, muy poquito que destacar. Ha estado mejor el Barça en el primer tramo de partido. Un acercamiento por banda izquierda de Junior Firpo tras una diagonal de Trincao ha acabado en un centro al que Mingueza no ha llegado por tres números de bota. En el 8’ se ha pedido penalti (tímidamente, todo hay que decirlo) sobre Trincao en una acción en la que Catena ha arriesgado una barbaridad tirándose en segada, pero que ha terminado en servicio de portería. 

OCASIONES PARA ADELANTARSE

Tras una prolongación de Ronald Araujo en un centro lateral delicioso de Messi a la que ha respondido con solvencia Dimitrievski y una llegada marca de la casa de Frenkie que ha terminado en el travesaño, el Barça se ha ido diluyendo. La presión arriba del Rayo ha comenzado a surtir efecto y los siguientes 10-15 minutos se han disputado prácticamente en la parcela de terreno del Barça. Problemas para los centrales para encontrar vías de pase, Junior arriesgando mucho y provocando acciones peligrosas de los franjirrojos y un cuadro de Koeman que no reaccionaba. No ha tenido excesivo trabajo Neto, eso sí, puesto que tan solo ha tenido que blocar un remate de cabeza manso de Catena. 

PRESIÓN ASFIXIANTE DEL RAYO

Hacia el 35’ ha relajado su defensa alta el conjunto vallecano y ahí han llegado los mejores minutos de un Barça que ha enlazado tres oportunidades clarísimas. Sobre todo la primera en una jugada en la que Trincao ha conducido totalmente solo en dirección a Dimitrievski (ex del Nàstic, por cierto), pero a la que el macedonio ha reaccionado de manera magistral. El rechace ha caído a pies de Riqui, que ha fintado genial dejando en el suelo a su marcador pero que ha mandado su chut al palo. Apenas un minuto después ha sido Griezmann el que ha rematado algo escorado y se ha encontrado con la reacción de nuevo del balcánico. Increíble que el equipo barcelonista no hubiera materializado ninguna ocasión. 

Algo apagado se ha mostrado en los primeros 45 minutos Leo Messi, poco de Griezmann, Trincao que seguía con ese gafe y con esa sensación de ‘vértigo’, Riqui de más a menos (como en Cornellà), pero aún así superioridad manifiesta y oportunidades de sobra para haber deshecho ese 0-0 que reflejaba el vetusto Estadio de Vallecas. 

TERCER BALÓN AL PALO

Misma tónica en el arranque del segundo tiempo. Y otro balón al travesaño. El tercero, en esta ocasión en un tiro libre desde el costado derecho que Messi ha golpeado como los ángeles. Poco después un balón de Busquets buscando la espalda de la defensa lo aprovechaba Leo pero su disparo salía desviado. El gol no llegaba y la ansiedad (y la apatía, una mezcla explosiva) ha empezado a hacer mella en los de Koeman. El duelo se ha convertido en un correcalles. Y eso lo venía genial a los de Iraola. A todo esto, algunos 'señalados'. Mingueza, flojo en esa demarcación de lateral diestro. Se nota que no está nada cómodo y se le apagan las luces cuando pisa el área rival. No le hace ningún favor Ronald, que, dicho sea de paso, no tiene alternativas con Dest y Roberto lesionados.

1-0 DEL RAYO Y REACCIÓN INMEDIATA

Como decíamos, el encuentro ha entrado en una vorágine de pérdidas y de arreones en el que el cuadro vallecano se ha visto claramente beneficiado. Dos acciones de Álvaro, que acababa de entrar, han espoleado a los madrileños, que han encontrado un botín tremendo tras una nueva acción del utrerano, que ha dejado clavado a Lenglet, ha obligado a intervenir a Neto y el rechace del brasileño ha caído en pies de Fran García. El canterano madridista (caprichoso destino) ha empujado el 1-0. Con el equipo roto, triple cambio de Koeman, que ha perdido la paciencia. Alba, Dembélé y Pedri, dentro. Riqui, Trincao y Junior, fuera.

LA PRIMERA UNIDAD INTIMIDA

Y la reacción ha tardado poquísimo en llegar. De Jong ha puesto la mirilla y ha servido un balón fantástico para Griezmann en profundidad y el pase del galo, milimétrico, lo ha empujado el '10'. 1-1, nuevo partido. Por cierto, que no se me olvide, 18º gol en 11 partidos de Messi contra el Rayo. A partir de ese momento y con la 'pólvora' sobre el verde, el Barça sí ha ido a sentenciar de una vez por todas el partido. De pronto ha parecido que el fantasma de una prórroga ha producido una pereza extrema en los de Koeman, que han seguido buscando las espaldas de la defensa vallecana y que se han encontrado en otro pase en profundidad con el 1-2. Balón de Messi para Alba y el de L'Hospitalet (en 10' ha hecho muchísimo más que Junior en 70) ha servido un balón para el llegador profesional de este equipo, De Jong. Novena asistencia de Alba, quinto gol en las últimas cinco semanas de De Jong.

Ha tenido tiempo el equipo vallecano en poner varios balones a la olla en un final de esos clásicos de partido sufrido, peleado. Messi ha podido sentenciar con un gol maradoniano, pero ha mandado el balón totalmente fuera. Una falta totalmente innecesaria de Mingueza ha acelerado las pulsaciones de las escasas 300 personas que debíamos estar en el patatal vallecano y de los culés en sus casas. Pero Cuadra Fernández ha señalado el final. 1-2 y pase a cuartos. Y poco más...