La factura que la repesca puede pasar a Messi y Mascherano

Leo Messi y Mercado durante el Sevilla-Barça de la Liga 2016/17

Leo Messi y Mercado durante el Sevilla-Barça de la Liga 2016/17 / AFP

Juan Manuel Díaz

Juan Manuel Díaz

No solo la afición albiceleste ha perdido el sueño con el decisivo Ecuador-Argentina de este miércoles 11 de octubre (1.30 horas, hora de Barcelona). También Ernesto Valverde y el FC Barcelona desean que la selección de Jorge Sampaoli consiga la clasificación directa para el Mundial de Rusia 2018... para que Leo Messi y Javier Mascherano se ahorren un 'repechaje' (eliminatoria de repesca) que les supondría casi 40.000 kilómetros extra de viaje y perderse el Barça-Sevilla de Liga.

Argentina puede conseguir el billete directo para el Mundial venciendo a Ecuador e incluso una derrota le podría llevar al repechaje, las combinaciones son muy numerosas. Evidentemente, el Barça prefiere a un Messi (y un Mascherano) feliz, con la ilusión del Mundial de Rusia, que un Leo deprimido ante un verano de vacaciones mientras el resto de cracks se disputan el título más atractivo. Además, el 'D10S' es la gran esperanza de la Albiceleste.

Eso sí, Valverde se hace a la idea de que lo más probable es que Messi y Mascherano deban afrontar la eliminatoria frente a Nueva Zelanda, que obligará a los dos argentinos a perderse con toda probabilidad el Barça-Sevilla del fin de semana de 4 y 5 de noviembre, y lo que es peor: a meterse entre pecho y espalda casi 40.000 kilómetros de viajes de avión en poco más de una semana. El Sevilla también perdería a Mercado y Banega para ese encuentro.

El viaje Barcelona-Wellington (Nueza Zelanda) para jugar el Nueva Zelanda-Argentina del 8 de noviembre supone un desplazamiento de 19.397 kilómetros. El Wellington-Buenos Aires para el partido de vuelta del 15 de noviembre representa volar otros 9.983 kilómetros. Y el regreso desde Argentina a Barcelona son otros 10.465 kilómetros.

En total, estamos hablando de 39.845 kilómetros que repartidos en diferentes vuelos, escalas y cambios horarios pueden suponer para La Pulga y El Jefecito un terrible maratón antes de regresar para ponerse de nuevo a las órdenes de Valverde de cara al Leganés-Barça del fin de semana del 18-19 de noviembre..