Eibar, el club del matriarcado

‘Otro fútbol es posible’ es el lema con el que Eibar (próximo rival del Barça en la Liga) irrumpió en su momento en la Primera división y con el que se ha asentado entre los grandes.

En plena lucha por las plazas europeas (séptimo, con 35 puntos), el club de la localidad más pequeña de Primera (27.417 habitantes según las cifras oficiales) ha demostrado que puede codearse con los mejores equipos de la Liga con un presupuesto modesto (45,3 millones), fiel a sus señas de identidad y llevando a cabo una especie de revolución silenciosa en el fútbol de elite.

Esa revolución pasa, entre otros factores, por una notable presencia de mujeres en la cúpula ejecutiva del club, empezando por su presidenta, Amaia Gorostiza, que accedió al cargo en mayo de 2016 y fue reelegida con el 80 por ciento de los votos de los accionistas en junio de 2017.ç

sin cuotas

Pero la presencia de las mujeres en el Eibar no se limita a la figura de su presidenta. “De las quince personas que formamos el personal no deportivo del club, cinco somos mujeres”, explica la directora general del club, Patricia Rodríguez, donostiarra de 35 años.

“Pero no es algo buscado ni forzado a base de cuotas”, aclara, “en el Eibar no se favorece la contratación de alguien por ser mujer, pero tampoco se tienen prejuicios”. Ella misma entró en el club en 2014 como directora de finanzas y recursos humanos gracias al portal Infojobs tras una etapa en la consultora PWC.

Además de la presidenta y la directora general, otras cuatro mujeres tienen cargos de relevancia en el Eibar: Arrate Fernández (responsable de protocolo y relaciones externas), Nagore Elorza (marketing), Ainara López de Viñaspre (marketing) y Estrella Tardío (atención al socio).

También forma parte del día a día del club la nutricionista Aurora Cid, aunque no está directamente empleada por el club sino por una empresa prestadora de servicios. De ahí que el diario ‘El Mundo’ titulase ‘En el Eibar mandan ellas’ un reportaje sobre el club, publicado a finales de enero.

Las raquetistas de Eibar: las primeras pelotaris

Lo que desde fuera puede parecer una novedad, en Eibar no lo es tanto. “Quizá tiene que ver con el tradicional matriarcado del que tanto se habla en Euskadi, y especialmente en Eibar”, reflexiona Patricia Rodríguez.

No en vano Eibar es la cuna de las raquetistas, las precursoras de las mujeres pelotaris: en los primeros años del siglo XX, Eibar llegó a tener tres escuelas de raquetistas (el frontón Astelena, el Kiputxa-Elorza y el municipal) frecuentadas por un grupo de mujeres que no tardaron en destacar y en dar el salto a otras ciudades (Barcelona, Madrid, Sevilla, pero también La Habana o Sao Paulo) para dedicarse profesionalmente al frontón. Las eibarresas fueron las pioneras del deporte femenino en Euskadi.

Por ello, nunca fue extraño que las mujeres fuesen al fútbol en Ipurua. “Por tradición y por historia, siempre ha habido la costumbre de que las mujeres vayan al fútbol, cuando en otros lugares no era tan habitual”, explica Rodríguez.

otro punto de vista

En un sector tan masculinizado como el del fútbol, ¿qué puede aportar la visión femenina? “Está claro que hombres y mujeres no somos iguales”, apunta la directora general del Eibar, “pero quizá las mujeres podamos aportar una visión más enriquecida, con ideas y puntos de vista distintos. En nuestro caso, tanto la presidenta como yo incidimos en que hay que tener serenidad, sangre fría y calma para gestionar con responsabilidad el dinero de los accionistas. No podemos gastar más de lo que tenemos”.

Poco a poco, la incorporación de la mujer al fútbol de elite se ve como algo habitual (“cuando voy a las reuniones de LaLiga el trato de los compañeros de otros clubes es absolutamente normal”), pero aún queda camino por recorrer.

“Costará tiempo, porque la incorporación de la mujer a la universidad ha sido más tardía y tardará en reflejarse en el fútbol. Hay gente que cree que las cuotas son necesarias, puede ser, pero nosotros creemos que esas cuotas hacen que se menosprecie la valía de las mujeres. No tenemos afán de cuotas, pero no vamos a poner barreras a la contratación de mujeres”.

A medio plazo, uno de los objetivos del Eibar en este sentido es que el equipo femenino, que ahora lucha por subir a la Liga Iberdrola, se convierta en un equipo profesional. De momento, el club acaba de incorporar a la japonesa Honoka Yonei, que ya es una más en las gradas de Ipurua.