Historia SPORT

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Las 10 claves del campeonato de invierno del Barça

El conjunto azulgrana ha finalizado la primera vuelta de la Liga con 50 puntos, 39 goles marcados y solo siete tantos encajados

Hay varias razones que explican la fiabilidad del equipo de Xavi Hernández en una competición que no gana desde el curso 2018/19

Real Sociedad - FC Barcelona | La asistencia de Balde a Lewandowski

Real Sociedad - FC Barcelona | La asistencia de Balde a Lewandowski / LALIGA

Jordi Carné

Jordi Carné

El FC Barcelona ha empezado el año 2023 con nueve victorias consecutivas que le han ayudado a proclamarse campeón de la Supercopa de España, clasificarse para las semifinales de la Copa del Rey y consolidarse como líder en solitario de la Liga. Los números de la presente temporada, Champions al margen, son prácticamente impecables. El proyecto de Xavi Hernández ha cogido velocidad de crucero, es cada vez más competitivo al máximo nivel y quiere más títulos para confirmar el resurgimiento azulgrana.

Especialmente imponentes son los números registrados por el equipo en la competición doméstica. El Barça ha finalizado la primera vuelta del torneo de la regularidad con 50 puntos, 39 goles marcados y solo siete tantos encajados. Los precedentes invitan al optimismo: en cuatro de las cinco ocasiones anteriores en las que el conjunto catalán alcanzó esta puntuación tras sus primeros 19 encuentros de la campaña ganó el trofeo. Hay varias razones que explican la fiabilidad culé en un campeonato que no gana desde el curso 2018/19.

Un visitante (casi) impecable

Al margen del clásico del Santiago Bernabéu (3-1), el cuadro barcelonista ha ganado todos los partidos a domicilio que ha disputado. Y eso que se ha desplazado a los estadios más exigentes sobre el papel menos San Mamés, La Cerámica y Vallecas. El 27 de 30 en puntos cobra aún más valor considerando que los rivales han sido Real Sociedad (1-4), Sevilla (0-3), Cádiz (0-4), Mallorca (0-1), Valencia (0-1), Osasuna (1-2), Atlético de Madrid (0-1), Girona (0-1) y Betis (1-2). De las nueve visitas que le quedan al Barça, seis son contra clubes en lucha por la permanencia.

Dos únicos ‘sustos’ en el fortín

El equipo blaugrana no solo es el mejor visitante. También es el mejor local de la Liga. Solo ha concedido dos empates en el Camp Nou y ambos se han producido en contextos muy específicos, en la jornada inaugural (0-0 ante el Rayo Vallecano) y en el primer compromiso después del Mundial (1-1 frente al Espanyol). Ter Stegen solo ha encajado una diana en casa, precisamente la de Joselu en el derbi. Y fue de penalti. El resultado global en nueve duelos es de 19 a 1.

Capacidad competitiva

Es incuestionable que el Barça ha aprendido a sufrir. Ocho de sus 16 victorias en Liga, la mitad, han sido por la mínima. Aunque esto manifiesta un evidente problema a la hora de ‘matar’ los partidos, también expone solidez defensiva y capacidad competitiva. La fortaleza en las áreas es una característica obligada para cualquier equipo que aspira a levantar trofeos.

El muro teutón

En ningún caso podríamos estar hablando de estas cifras sin destacar la figura de Ter Stegen. El portero alemán ha recuperado su mejor versión y está siendo decisivo bajo palos. Ha jugado todos los minutos, ha recibido siete goles y, con sus 34 paradas, ha dejado a cero su portería en catorce ocasiones. Va camino de su primer Zamora: tiene un coeficiente de tantos encajados por partido de 0,37 y el de sus perseguidores inmediatos, Rajkovic (Mallorca) y Remiro (Real Sociedad), es de 0,95.

Lewandowski, sinónimo de gol

El ariete polaco, mucho más que un depredador del área, es una pieza fundamental en el ataque culé. Lo plasman las cifras de goles que ha celebrado (14) y asistencias que ha repartido (4) en sus 16 apariciones. En competición doméstica, el ‘9’ azulgrana ‘moja’ cada 89 minutos y participa en una diana cada 69. Aunque en algunos momentos no logra entrar en juego tanto como le gustaría, su olfato es realmente increíble. Robert es uno de esos atacantes que no necesita protagonizar grandes actuaciones para marcar diferencias.

Dembélé abandera a los ‘escuderos’ del polaco

Por muy voraz que sea, ‘Lewy’ no puede ser la única amenaza. Es irrebatible que el Barça viviría mucho peor sin él, pero no es menos cierto que consiguió ‘sobrevivir’ a la sanción de tres partidos que sufrió su estrella. En gran medida lo logró gracias a un Ousmane Dembélé (cinco goles y cinco asistencias) que, antes de lesionarse, se encontraba en su mejor momento desde su llegada a la Ciudad Condal. Raphinha y Ansu (tres goles y tres asistencias) también han sumado mucho. Especialmente el brasileño, que ha sido decisivo en cuatro triunfos por la mínima.

Paso adelante de Pedri

El tinerfeño se propuso aumentar su presencia en área contraria y su influencia en los metros decisivos y, sin lugar a dudas, lo está consiguiendo. Ya ha marcado cinco tantos en Liga (además del que se apuntó en la final de la Supercopa) y está superando cualquier expectativa en su tercera temporada en la élite. Xavi necesitaba su faceta más letal y, aunque aún debe pulir algunos detalles, el canario superará la decena de aciertos en una campaña si continúa a este ritmo.

Defensa consolidada

Si durante el mercado de invierno se ha retirado un central histórico como Piqué y se ha ido el único lateral derecho puro de la plantilla (Héctor Bellerín) y el barcelonismo no tiene la sensación de que la retaguardia culé se ha debilitado es porque Xavi ha encontrado a sus zagueros de garantías. Jules Kounde, Ronald Araujo, Andreas Christensen y Alejandro Balde se han consolidado en una línea defensiva joven, física y ‘low cost’ (solo se pagó una cantidad importante por el francés y alrededor de cinco ‘kilos’ por el uruguayo). Cuando los cuatro han estado sanos y han compartido titularidad, el Barça siempre ha ganado.

Los cuatro centrocampistas, indiscutibles

La exhibición de Sergio Busquets en el Benito Villamarín demostró una vez más que, en el ecosistema adecuado, el capitán aún puede ser el mejor del mundo en su posición. Acompañado de Frenkie de Jong, Pedri y Gavi, el de Badia vuelve a brillar. El sistema con cuatro centrocampistas ha llegado para quedarse. Más si cabe teniendo en cuenta la salida de Memphis Depay y la lesión muscular de Dembélé.

Juventud al poder

En el once de gala del Barça solo hay tres futbolistas que superen los 30 años: Ter Stegen, Lewandowski y Busquets. La media de edad de la alineación de Xavi para las grandes citas es de 25,3 años. Pedri (1.453 minutos), Balde (1.206’) y Gavi (1.192’), las caras destacadas de la nueva generación blaugrana, son el primer, quinto y sexto jugadores de campo, respectivamente, con más participación hasta el momento en la Liga. La confianza del técnico en la juventud es ciega. El míster, de hecho, ya ha avisado que si hay lesiones en el segundo tramo del curso, tocará tirar de la Masia.

“Vemos y analizamos a los jóvenes de la cantera cada fin de semana. Todos están capacitados: los que estén preparados mentalmente, tendrán oportunidades”, avisó el egarense en una rueda de prensa reciente.