Brais Méndez, la exquisita zurda que sorprendió al Camp Nou

Todo está pasando muy deprisa para Brais Méndez. Su consagración en el Celta, la llamada de la selección, el interés de grandes clubs de la Liga y la Premier… pero hasta llegar a la cima, el camino no ha sido de rosas, más bien lo contrario. Él mismo se ha definido en más de una ocasión como un “currante” al que nadie le ha regalado nada. Por eso, el ‘repentino’ éxito no se le ha subido a la cabeza a este mediapunta de exquisita zurda que el sábado volverá al Camp Nou, el lugar donde se puede decir que comenzó todo.

Brais solo llevaba a sus espaldas dos partidos en Primera División, así que su presentación en sociedad llegó en un coliseo tan impresionante como el azulgrana. No se intimidó y ahí jugó un importante papel su frialdad, que él propio futbolista reconoce. Es su forma de ser. Juan Carlos Unzué le otorgó la confianza y la jugada le salió redonda. Los celestes arrancaron un meritorio 2-2. Brais, la novedad en el once titular, rubricó un partidazo que ahora, más maduro y hecho como futbolista, quiere repetir.

Nació un 7 de enero de 1997 en Mos, la localidad donde el Celta está proyectando su futura Ciudad Deportiva y hasta podría albergar el nuevo estadio si no se acaban los continuos rifirafes entre el presidente del club, Carlos Mouriño, y el alcalde de Vigo, Abel Caballero. Pero esta es otra historia... 

la 'morriña' en Villarreal

El fútbol corre por sus venas, no en vano su padre, conocido futbolísticamente como ‘Pupi’, fue delantero de aquel Juventud Cambados que, patrocinado e impulsado por Sito Miñanco, el histórico narco en el que se ha inspirado la serie ‘Fariña’, llegó a instalarse en la Segunda B para sorpresa de todos.

Brais, por su parte, se inició en el fútbol sala, donde adquirió conceptos técnicos que después le han servido de mucho, y jugó después en el Santa Mariña, donde no pasó desapercibido para ‘Milucho’, cazatalentos en Galicia del Villarreal. Al fútbol base del 'submarino amarillo' se fue Brais, pero la ‘morriña’ se lo comió. Alejado de los suyos, aguantó dos años que le hicieron crecer en lo futbolístico y como persona. Regresó ya para jugar en el Celta y cumplió todas las etapas desde el cadete al primer equipo. Sin prisa, incluso la temporada pasada, cuando en los pocos partidos que no le convocó Unzué, no tuvo ningún problema para regresar filial. Su caso recuerda al de Aleñá.

debut con la 'roja' para la historia

Brais culminará en el Camp Nou un año que ha calificado de “ensueño”. El cuerpo técnico que tuvo Unzué en el Celta es el mismo que acompaña ahora a Luis Enrique en la roja y el asturiano, que ya conoció a un juvenil Brais en su época de entrenador celeste, no lo dudó ni un instante. Le convocó para la absoluta y el centrocampista marcó en su debut el gol que derrotó a Bosnia en un insípido partido.

En el Celta, Brais ha aprendido a defender, fue mucha la ‘caña’ que le dio Alejandro Menéndez la pasada campaña con el ‘B’, y a tener una mejor relación con el gol, gracias a los consejos de quien le asesora, el exdelantero celeste Juan Sánchez, miembro del equipo de representación de Vicente Forés. Esta temporada, Brais ya ha marcado cuatro goles, ha dado cinco asistencias y sigue los pasos de su admirado Iago Aspas. El sábado, volverá a pisar el Camp Nou, pero ya no como un desconocido, así que bien hará el Barça en no dejarse sorprender.