El central, al caer

El Barça cerrará el fichaje de un central en las próximas horas. De hecho, habrá fumata blanca hoy mismo y podría anunciarse de forma inminente. Y el casting final solo contempla dos nombres: Andreas Christensen (Chelsea) y Jeison Murillo (Valencia).

La prioridad absoluta y el futbolista que crea más consenso es el central danés del Chelsea, pero las negociaciones son muy, muy complicadas y hoy podrían irse al traste.

En ese caso, el Barça abordará la operación Jeison Murillo, que comenzó a negociarse ayer, con Ernesto Valverde como gran valedor a pesar de que no cuenta con el consenso del club. El deseado refuerzo que ha pedido el técnico con urgencia está ya muy cerca de caer.

MÁXIMA URGENCIA

El área deportiva del Barça llevaba varias semanas trabajando con la certeza de que habría fichaje por la incómoda lesión de Umtiti. La decisión final se demoró algo por el tratamiento al que estaban sometiendo al francés, pero todo se aceleró por la lesión de Vermaelen. Ernesto Valverde quería a un central y lo quería ya. El entrenador dejó claro a la secretaría técnica que no podía esperar y que deseaba la incorporación de un futbolista que contase con su clara aprobación. La temporada pasada tuvo que aceptar la llegada de Yerry Mina, un futbolista que no quería y que no hizo jugar más que de forma testimonial. Y eso no iba a volver a pasar.

Es por ello que Valverde apremió a cerrar un fichaje ya y descartó las opciones en las que las negociaciones podían demorarse más de lo deseado. Por el camino se quedaron veteranos como Ivanovic (Zenit de San Petesburgo) o Rugani (Juventus), futbolista al que los italianos no querían dejar salir por nada del mundo.

Encima de la mesa quedó Christensen, un central con el que se ha ido negociando en las últimas semanas y que está haciendo todo lo posible para salir del Chelsea. El danés hará un último intento a la desesperada porque su ilusión es firmar por el Barça. El Chelsea, por ahora, no ha cedido ni un ápice e intentarán que haya un milagro. La oferta del Barça es asumir la ficha hasta finales de temporada, un pago de tres millones de euros por la cesión y una opción de compra de más de 40 millones de euros. La fumata blanca es complicada.

Ernesto Valverde ha apretado por cerrar ya la incorporación y la única que le convencía y que podía concretarse ahora era la de Jeison Murillo. El central colombiano no crea ilusión y consenso en el club, pero si acaba fichando será una concesión al entrenador para que pueda dirigir con éxito el tramo final de temporada. El entrenador balugrana considera que Jeison Murillo ha jugado ya al máximo nivel en Europa y tiene suficiente experiencia en la Liga española como para tener rendimiento inmediato. Si Christensen no firma, fichará él.

‘Rac-1’ anunció ayer por la mañana el interés del Barça por Murillo. La realidad es que el ofrecimiento del futbolista llegó hace muy poco y su nombre solo se ha debatido esta semana tras caerse muchas de las opciones que había encima de la mesa. Su agente viajó hacia Valencia con la intención de cerrar cuanto antes un acuerdo entre todas las partes. Y la realidad es que el entente será fácil porque el club che desea sacárselo de encima. No cuenta para nada para Marcelino García Toral y el Valencia llevaba semanas intentando encontrarle acomodo por media Europa. Finalmente, el acuerdo se cerraría con una cesión sin opción de compra en el que el Barça pagará su ficha y una compensación económica de 1,5 millones de euros por el préstamo de seis meses.

El futbolista colombiano está plenamente atado y a la espera de que el Barça acabe por apretar el botón de su contratación. Si Christensen no sale del Chelsea, el club hará efectivo este acuerdo y Murillo se incorporaría al grupo tras las vacaciones Navideñas. Solo vendría por seis meses.