El Barça que viene: una foto para la historia

Cuando más cerca estás de un futbolista joven de éxito más terrenal se vuelve. Incluso cuando son jugadores del Barça que tienen la obligación de rendir como futbolistas consagrados. Hay algo desproporcionado en la imagen que proyecta la televisión y el relato de sus conquistas. Pero cuando se rompe esa barrera, mientras posan para una fotografía que será portada, intuyes pudores, coquetería adolescente y una actitud entrenada para aparentar siempre fortaleza.

Todos ellos -Araujo, Balde, Ansu, Pedri, Gavi, Ferran Torres y Eric Garcia- llegan al campo de entrenamiento 9 de la Ciudad Deportiva en actitud distendida. Hablan entre ellos, asienten a algunas instrucciones del fotógrafo, y por momentos parecen absortos en su propia burbuja. Un universo privado que incluye camaradería y guiños generacionales; palabras recurrentes (“hermano”), expresiones que se repiten (“es una locura”) y bromas de vídeos virales. “Son la generación TikTok”, recuerda un empleado del club. 

Siete elegidos

Son siete jóvenes, todos mundialistas, que tienen que ser el futuro del Barça pero que, en realidad, ya son el presente. El mayor es Ronald Araujo (23 años), que llega con su inseparable mate. Su termo incluye referencias a Dios, imágenes de su familia y también suyas con la camiseta del Barça. 

Su historia es distinta: se formó lejos del fútbol español y llegó sin hacer ruido pasando por el filial. Incluso su fútbol generaba escepticismo porque Araujo parece un defensa de otros tiempos: de esos que crecieron disfrutando de defender. El uruguayo ha tenido que entrenar su pie para otro fútbol. Para el de un Barça que prioriza la salida de balón. 

Sus orígenes, unos comienzos humildes, marcan un carácter amable fuera del campo. También durante esta sesión donde asume ser junto a Eric Garcia (21 años) el encargado del cañón de confeti. El joven central se sitúa en el otro extremo de la fotografía, al lado de Ferran Torres (22 años), uno de sus mejores amigos de la plantilla. 

Los dos ya saben lo que es tener que convivir con la máxima exigencia y las críticas a pesar de su juventud. Los dos son piezas importantes para Xavi y también en la selección. También Gavi (18 años) y Pedri (20 años), dos jugadores destinados a ser fijos en el mediocampo del Barça al menos una década. 

Su irrupción ha sido tan deslumbrante en los últimos años que la comparación con Xavi e Iniesta se ha vuelto recurrente. Lo saben sus compañeros que durante la sesión bromean con la presencia, en el centro de la instantánea, de los dos centrocampistas. 

Al lado de Pedri sonríe Ansu, que tiene un no-sé-qué para salir bien en las fotos. Durante la sesión se nota la complicidad entre todos, también con el último en quedarse en el primer equipo: Alejandro Balde (19 años). 

El lateral es el único que se ofrece para salir de cuclillas en una primera idea de la fotografía. Una idea que finalmente se desecha, tras las risas de sus compañeros, para que todos salgan a la misma altura. Tiene sentido: así es el Barça que viene. Un equipo joven sin las jerarquías de otros tiempos donde todo está por hacer.