El Barça recupera la grandeza y cae con todos los honores

Hasta en dos ocasiones los de Xavi igualaron un gol adverso; los azulgranas merecieron mucho más, pero esta vez, el resultado fue lo de menos

Los de Xavi pusieron el fútbol, la actitud y el orgullo; se sobrepusieron a todas las adversidades y la derrota marcará un punto de inflexión

"¡Aparece libre de marca, lleno de potencia y de puntería el uruguayo Valverde, que con la pierna derecha fusila Ter Stegen!"

"¡Aparece libre de marca, lleno de potencia y de puntería el uruguayo Valverde, que con la pierna derecha fusila Ter Stegen!" / Carrusel Deportivo

German Bona

German Bona

Hay victorias que no dicen nada y derrotas con sabor a triunfo. El Barça solo perdió en el resultado contra el Real Madrid. Ganó en intención, en actitud, en amor propio. Llevó a un rival que se las prometía muy felices hasta el límite de su resistencia. Con orgullo. Y con mucho fútbol. Hasta por dos veces igualó el equipo de Xavi un resultado adverso. La prórroga fue definitiva, la contra le pudo finalmente al dominio. Pero el Barça recuperó su grandeza en Riad y esta derrota marcó el punto de inflexión que tanto buscaba Xavi. Los perdedores se fueron con la cabeza muy alta. Los ganadores, asustados. El Barça ha vuelto.

Barça - Real Madrid (12/01/2022)

Supercopa de España

2
3
Alineaciones
Barça
Ter Stegen; Alves (Nico, 78'), Araujo, Piqué, Jordi Alba; Busquets, Gavi (Memphis, 78'), Frenkie de Jong (Pedri, 46'); Ferran Torres (Abde, 46') (Jutglà, 112')) Dembélé y Luuk de Jong (Ansu, 65').
Real Madrid
Courtois; Carvajal, Militao, Nacho, Mendy; Casemiro, Modric, Kroos; Asensio (Rodrygo, 67'), Vinicius (Camavinga, 111') y Benzema.

Xavi fue valiente, salió con todo y dejó a Memphis en el banquillo. Carlo Ancelotti perdió a Alaba a última hora. Benzema dio el primer aviso cuando solo se habían jugado dos minutos, el Real Madrid buscó minar la confianza azulgrana desde el primer momento. El guión previsto, un Barça dominador, aunque con poca profundidad, y los blancos, descaradamente a la contra buscando la velocidad, en especial de Vinicius.

Se adelanta el Real Madrid

Reclamó Luuk de Jong pena máxima por mano de Militao, pero la tenía pegada al cuerpo. Los de Ancelotti siguieron llegando, cada vez con más peligro y el Barça se fue confundiendo. El sufrimiento derivó en una pérdida de Busquets, la recuperación de Benzema, transición rápida y golazo de un inspirado Vinicius pese a estar encimado por Araujo.

Fantástica reacción azulgrana

Quien más quien menos ya vio venir la hecatombe. Un equipo joven, cogido con pinzas, frente a la voracidad de un Madrid que siempre quiere más. Se relamían los blancos. Pues se equivocaban. El Barça es el Barça. Sacaron los jugadores el orgullo, se quitaron todos los miedos de encima y empezaron a jugar al fútbol. Primero, tímidamente; después, cada vez mejor. Con Ferran y Dembélé sirviendo desde las bandas, Luuk fue afinando la puntería. Un primer cabezazo a las manos de Courtois, un remate forzado... Ousmane también se apuntó con un potente derechazo alto.

El decorado había cambiado por completo. Se confió el Madrid, creció el Barça... y la fortuna también contó. Hay que estar ahí, en la zona del gol. Y Luuk está. Militao despejó al pie del neerlandés, balón al palo y a la red. Billar a tres bandas y los azulgranas, vivos en el partido.

El empate fue fruto de la insistencia de un equipo que no se rindió y acabó el primer tiempo en el área madridista. Para sacarse el sombrero.

¡Se repitió la historia!

Ya dijo Xavi que tendría que dosificar a sus jugadores y arrancó la segunda mitad con la entrada de Pedri y Abde por Frenkie y Ferran. Y entró el Barça lanzado al césped, dando continuidad a su gran imagen. Pedri reapareció con ganas, su chut ajustado no entró por muy poco. Luuk siguió haciendo de las suyas.

Siguió refrescando Xavi el ataque. Ansu entró por Luuk. Podía ser el momento, pero quien apareció para salvar los muebles del Madrid fue Karim Benzema. Detectar los problemas de un Barça ya con síntomas de cansancio. Primero se fue de Araujo y envió una rosca al palo. Después, ya no falló. Ter Stegen desvió como pudo, pero el balón le llegó a Carvajal, que asistió al francés.

Xavi buscó un último giro de guión. Entró Memphis para jugar con doble punta y defensa de tres centrales. Le salió bien. Las apuestas con sentido y criterio siempre salen bien. ¿Y quién empató? Quien más se lo merecía. Ansu Fati. Con el corazón azulgrana latiéndole a mil por hora, se adelantó a los marcadores y cabeceó el medido centro de Jordi Alba. ¡Qué locura!

Y se fue el Barça a por el tercero. Solo la campana salvó a un Madrid contra las cuerdas.

Prórroga maldita

Los azulgranas sacaron fuerzas de flaqueza en la prórroga. Es increíble lo que hace la cabeza. Y un gran entrenador. Quien parecía haber tenido tantas bajas en las semanas previas, quien ya no llegaba era el Madrid,. Porque el Barça quiso y tuvo lo más importante del fútbol: el balón. Madurando la jugada y de golpe, latigazo en los metros finales. Ansu, Abde... ocasiones para merecer y marcar el tercero. La juventud da alas, pero también demasiada impetuosidad. Tanto se volcó el Barça que sufrió una contra letal culminada por Valverde. Cuatro atacando, solo Araujo defendiendo. Injusto, muy injusto.

Remontar tres veces ya fue demasiado para este Barça, aunque lo siguió intentando. Hasta el final. Doble ocasión de Busquets y Dembélé desbaratada por Courtois. En la segunda parte del tiempo suplementario, más de lo mismo. Abde rozó el gol. El equipo lo intentó hasta el final, sin importarle que Rodrygo se quedara solo ante Ter Stegen. El fútbol no fue justo con este equipo en Riad, pero tarde o temprano lo será. Porque este Barça vuelve a ser grande.