El Barça se desangra en defensa: los intentos (fallidos) para frenar la hemorragia

"Encajamos muchos goles. Los errores defensivos nos están matando. Las concesiones en defensa son el resumen del partido y de la temporada. Así es muy difícil, si queremos ganar cosas a nivel defensivo tenemos que mejorar mucho". Hace semanas que hay una brecha entre lo que quiere Xavi de sus jugadores y lo que ocurre en el campo.

Amargo regreso de Ter Stegen

El técnico insiste tras un mal resultado en que el equipo trabajó durante la semana aspectos que luego, cuando los plantea el rival en el campo, el equipo parece incapaz de contrarrestar. El Barça se desangra esta temporada en defensa. Son ya 33 goles encajados en 24 jornadas por los 20 en 38 partidos de la campaña anterior.

"Llevamos toda la temporada encajando goles muy rápidos"

La cifra es aún más demoledora si se pone el foco a este año: según recoge Opta, el Barça ha encajado 23 goles en 11 partidos en 2024 entre todas las competiciones, más que cualquier equipo de las cinco grandes ligas de Europa desde el comienzo del año.

"Tenemos que estar mucho más concentrados en los centros laterales, estar más enchufados, lo sabemos, pero hoy no lo hemos hecho. Mejorar depende de nosotros, la temporada es larga, tenemos que estar concentrados y enfocados para mejorar”, apuntó ayer Ter Stegen. El regreso del alemán sirvió que constatar que el Barça arrastra un problema estructural en defensa que está por encima de nombres concretos. "Llevamos toda la Liga encajando goles muy rápidos, y eso nos está haciendo perder puntos", recordó Lamine, la mejor noticia del empate ante el Granada

Ante el Granada, ya sin Iñaki Peña en el once, el Barça encajó tres goles y pudieron ser más. "Cuando te equivocas, el rival puede marcar. Marcamos el primero y podríamos haber decidido el partido, pero cometimos errores defensivos. Este escenario se ha repetido varias veces", recordó Iñigo Martínez, una de las novedades del once Xavi.

Descansó Araujo y se mantuvo Cubarsí, esta vez en una posición más centrada, formando una defensa de tres centrales junto a Koundé y Martínez. Cancelo de nuevo fue mucho más extremo que lateral y Christensen acompañó a la defensa como mediocentro. Pero el último intento de Xavi por recuperar la solidez defensiva tampoco está frenando la hemorragia.

Una estructura sin Gavi ni Busquets (y el efecto Cancelo)

Los rivales están pellizcando al Barça con muy poco. Incluso el Granada, que solo había marcado tres goles en 2024, los mismos que ayer en Montjuïc. Xavi ha ido probando fórmulas esta temporada pero sin dar con la tecla. La temporada pasada se consolidó una línea defensiva con Koundé, Araujo, Christensen y Balde. Una defensa que además encontró equilibrio con la figura de Gavi como cuarto mediocampista y el papel de Busquets como medicentro posicional.

Esta temporada, la llegada de Cancelo y las preferencias de Koundé de jugar de central, sacudieron la línea defensiva del equipo. Xavi probó de juntar a dos laterales ofensivos como Cancelo y Balde, con Jules haciendo funciones de central durante varios partidos. Una fórmula muy ofensiva que hizo que los rivales hicieron daño al Barça a la espalda de los laterales.

Xavi tuvo que recuperar la hoja de ruta de la temporada pasada con Koundé de lateral derecho y la lesión de Balde hizo que Cancelo pasara a jugar de lateral izquierdo. Las lesiones durante la temporada también hicieron que Xavi tuviera que mover piezas e incluso incorporar algunas de nuevas como Cubarsí. Con solo 17 años el central ha dejado muy buenas sensaciones, aunque en situaciones defensivas también le está penalizando la falta de estructura del equipo.

En los últimos partidos estamos viendo un Barça que defiende con tres centrales, con el refuerzo de Christensen como mediocentro, pero de nuevo sin la consistencia que la temporada pasada fue clave para lograr el campeonato. Xavi sigue sin dar con la tecla y el Barça se desangra en defensa.