Milan, 4 - Barça, 0

Atenas 1994: El final de una época

Si existe un mal recuerdo sobre la historia del Barça en Europa ese es el de la final de Atenas de 1994. Fue allí, en otra de las ciudades históricas de la época antigua, donde el famoso Dream Team vio como el Milán de Capello le daba un baño que significaría el principio del fin de una época

Alba Martín

Muy pocos podían pensar antes de aquel fatídico 18 de mayo de 1994 que la historia tendría el final que tuvo. El Barça de Johan Cruyff llegaba a su segunda final europea, después de ganar su cuarto título de Liga consecutivo en un final agónico, donde un penalti fallado por Djukic permitió a los azulgranas cantar su el alirón. El Dream Team todavía funcionaba, y pese a que ya no conseguía dominar con la autoridad de antaño, la llegada de Romario al equipo había dado aires nuevos a la maquinaria de Cruyff.

Enfrente, el Milán, la antítesis futbolística de los azulgranas, que, sin embargo, venía de ganar con contundencia el campeonato italiano. Fútbol físico, conservador y una preparación extrema le sirvió al entonces entrenador rossonero, Fabio Capello, para dar la sorpresa e infringir una dolorosa derrota (4-0) al Barça de Cruyff.

Desde el inicio, aquella final sólo tuvo un color: el italiano. La fuerte presión ejercida por Desailly, anuló por completo el medio del campo azulgrana dirigido por el actual entrenador del Barça, Pep Guardiola, y permitió a Massaro adelantar a los rossoneros con dos goles antes del descanso (22' y 45'). En la reanudación, no hubo tiempo para la reacción, ya que un tanto tempranero de Savicevic (47') dejó el partido muy cuesta arriba para los de Cruyff. Desailly, en el 57', puso la guinda.

Al final, 4-0 en el marcador, nueva derrota europea y fin de época para el Dream Team. La segunda copa de Europa para el Barça debería esperar.