La equipación de Pau ya causa furor

El FC Barcelona estuvo hábil el martes y nada más anunciar el fichaje de Pau Gasol puso a la venta la equipación oficial del doble campeón de la NBA a través de la web y en las tiendas oficiales.

Y en cuestión de minutos se dispararon las ventas pese al elevado precio: 110 euros la camiseta de juego y 70 el pantalón; es decir, 180 por la equipación completa. Pese a la complicada situación económica que viven las familias por el Covid-19, los buenos aficionados están entendiendo que se trata de una ocasión única y quieren tener la ropa de su nuevo ídolo.

Tal y como explica ‘Palco 23’, la llegada de Pau supone una bocanada de aire fresco para una Liga Endesa muy azotada por la ausencia de aficionados en los pabellones por culpa de la pandemia, aspecto que representa en torno al 20% de los ingresos de los clubs.

Aunque su salud económica es mejor, el mejor jugador español de todos los tiempos también dará un importante empujón a la Euroliga y contribuirá a expandir la importancia de estos dos torneos.

Un simple dato serviría para explicar esta caída en el interés general por la máxima categoría del baloncesto español. En la campaña 1996-97 la Liga se emitía en abierto y la media superaba con asiduidad el millón de espectadores por partido. En la 2018-19 la Copa del Rey tuvo una audiencia media de 560.1000 y la pasada final en la que el Barça derrotó a los blancos se quedó en tan solo 423.000.

“Es la mejor noticia y la que más ilusión nos hace en la Federación. Y que pueda incorporarse a la Liga Endesa también es un impacto muy positivo”, dijo el máximo mandatario federativo Jorge Garbajosa.

Devoción por el ‘16’

Desde que accedió al primer equipo azulgrana, Pau Gasol solo dejó de lucir el ‘16’ en dos equipos. Al ir los dorsales del ‘4’ al ‘15’ en los torneos de selecciones el catalán optó por el ‘4’ y se quedó con el ‘17’ en los Bucks al estar retirado el ‘16’ por Bob Lanier.

Sí lo llevó en el Barça, en Memphis, en los Lakers, en los Bulls, en los Spurs y lo habría tenido en Portland de no haber sido por esa pesada lesión que le impidió debutar.