El Barça arrolla al Madrid y recupera el trono en la Copa

Con un estelar Cory Higgins (20) el Barça recuperó el tñitulo de Copa dos años después (73-88)

Los de Jasikevicius llegaron a dominar de 24, en un gran encuentro coral del equipo azulgrana

¡El Barça, campeón de la Copa del Rey! El resumen de la victoria ante el Madrid

Ramon Palomar

Ramon Palomar

El Barça se impuso con autoridad al Real Madrid en la final de Copa (73-88) y recupera el trono cedido hace dos años al conjunto blanco, que se vio impotente para frenar a un Barça sólido, muy físico y efectivo con Higgins al frente (20) para llevarse el título en el WiZink Center.

MADRID-BARÇA

Copa del Rey

73
88
Alineaciones
R. Madrid, 77
(11+20+19+23): Llull (8), Causeur (5), Abalde (15), Deck (9) y Thompkins (8) -cinco inicial-, Carroll (-), Tyus (-), Laprovittola (-), Tavares (17), Reyes (2), Garuba (-) y Alocén (9
Barça, 88
Calathes (12), Higgins (20), Hanga (3), Mirotic (12) y Pustovyi (2) -cinco inicial-, Oriola (2), Abrines (8), Davies (10), Westermann (-), Bolmaro (-), Smits (13), y Kuric (6).

Sin duda, un triunfo merecido para los azulgrana que abren de la mejor manera posible la era Jasikevicius, uno de los más felices por sumar su primer título, al igual que Mirotic. Quizá es el inicio del dominio azulgrana en la liga Endesa y Europa.

El Madrid tuvo una mejor puesta en escena inicial, con un agresivo Abalde que le ganaba la partida a Calathes, mientras que Thompkins ponía al Madrid por delante (7-4). Pero el Barça solo necesitó dos minutos para poner en marcha su máquina defensiva. El tiempo que Mirotic empezó a postear a Deck, que no podía con el montenegrino.

El Barça enciende el turbo

El Barça encendió el turbo, y entre su buena defensa y los errores del Madrid en ataque, que no encontraba buenas posiciones de tiro, el marcador empezó a dispararse para el Barça. Del 7-4 para el Madrid, se pasó a un contundente 7-18 tras triple de Smits.

Un parcial de 0-14 que hacía mucho daño a los de Laso, incapaces de reaccionar incluso con Tavares, bien neutralizado por Pustovyi y Davies después. El Barça cerraba e primer curto con claro dominio del juego y del ritmo del duelo (11-20).

El Madrid, viendo que se le escapaba el Barça, trató de subir la intensidad defensiva. Pero entonces fue el Barça el que empezó a carburar en ataque, con buenos balones dentro para Mirotic y Davies o buscando el tiro exterior con Abrines.

Tavares no carburaba

Mientras, Tavares cometía la segunda falta, sin ser un factor en el Madrid. Y sin Tavares activo, el Madrid sufre y mucho. Tampoco estuvieron acertados ni Carroll, ni Llull, y con Rudy con problemas físicos -no jugó-, el partido tomaba claro color blaugrana.

La defensa del Barça se crecía por momentos, y encima empezaron a llegar los triples. Calathes, Smits y Hanga ‘martilleaban’ el aro del Madrid que veía como el Barça se iba en el marcador de manera sangrante (29-49). Y eso, sin Mitoric, ‘tocado’ por un golpe en las costillas.

Así destrozó el ‘MVP’ Higgins al Real Madrid en la final

Así destrozó el ‘MVP’ Higgins al Real Madrid en la final / ACB

Los azulgrana eran dueños del partido de una manera insultante, sin que el Madrid encontrara una vía por donde hacer daño a los de Jasikevicius, que se fueron al descanso con 21 puntos de diferencia (31-52). La tarea ahora era tratar de mantener esa intensidad y el título no podía escaparse.

Una máxima de 24

El Barça lograba una máxima de 24 (31-55) en un dos más uno de Higgins. Y el Madrid se lanzó entonces a una carrera loca por tratar de recuperar o tirar definitivamente el partido. Y les salió cara. Con un Tavares mucho más efectivo y los puntos de Llull, el Madrid recortó a 14 (47-61).

Fueron los únicos minutos de ciertas dudas del Barça. Pero de ahí no pasó. Con Tavares en el banquillo con cuatro faltas, volvió la defensa intensa azulgrana, que recuperó la iniciativa a pesar de los triples de Llull y Causeur. Los azulgrana cerraban el cuarto con tres canastas consecutivas y la diferencia volvió a los 19 (50-69). El esfuerzo blanco sirvió de bien poco.

Aunque el corazón de los blancos nunca se puede poner en duda. Y la mini reacción llegó de la mano de los jóvenes Alocén y especialmente de Abalde. Este último acercó al Madrid a 11 (67-78) con cuatro minutos por jugar. Pero no pasó de ahí, los blancos se alocaron lanzando y el Barça dejó que pasaran los minutos para celebrarlo mucho antes del final. ¡Felicidades Barça!