Seat León Cupra 300

Un Cupra para la historia

Probamos la versión deportiva del León que supera la barrera de los 300 CV con una aceleración inferior a cinco segundos y un precio muy competitivo.

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El mercado de los compactos deportivos de producción está que arde. Las potencias se disparan, ofreciendo prestaciones inimaginables hace algunas décadas y un comportamiento dinámico extraído directamente del circuito. Hace algunos meses pudimos asistir a la presentación del nuevo Seat León 2017, una actualización que ha puesto al día a este superventas. Ya entonces, las especulaciones sobre su versión Cupra adelantaban que no se trataría de un modelo potenciado sin más y tras la presentación internacional en Barcelona podemos afirmarlo.

El nuevo León Cupra llegará a nuestras carreteras el mes que viene con un objetivo claro: seguir evolucionando e incrementando el número de ventas (la matriculación de Cupras en España se ha duplicado desde 2013 y triplicado en Europa). Para eso mantendrá las tres opciones de carrocería (3p, 5p y ST) con una novedad muy esperada: la opción familiar dispondrá de la tracción total 4Drive unida al cambio automático DSG de seis velocidades. De este modo Seat se asegura mantener la promesa de ser un vehículo con el que poder vivir tú día a día sin perder esos momentos de libertad y diversión con tal sólo apretar el botón Drive Profile (Confort, Sport, Eco, Individual y Cupra).

Estética conservadora

En el apartado estético el Cupra hereda las modificaciones del nuevo León, a las que suma los detalles específicos que lo identifican como el más deportivo de su familia. El paragolpes delantero cuenta con unas entradas de aire más grandes, llantas de aleación de 19 pulgadas, pinzas de freno Brembo (opcionales con paquete Performance) y doble salida de escape cromada además del spoiler trasero. La paleta de colores integra dos nuevos metalizados: Mistery Blue y Desire Red además de las opciones estéticas Performance (Black Pack y Orange Pack). Su interior utiliza el Alcantara, costuras en blanco y cuero perforado para aportar el toque deportivo, al que se suma los logos Cupra de su habitáculo y carrocería.

Como ya sucede con el León, la versión potenciada incorpora las últimas soluciones tecnológicas como los nuevos faros Full LED, freno de mano eléctrico, sistema Kessy de apertura y arranque del motor sin llave y pantalla táctil de ocho pulgadas con el sistema Radio Media System Plus e incluso cargador inalámbrico para tu Smartphone. En cuanto a los sistemas de ayuda a la conducción, incluye las últimas primicias de la marca.

Pero vayamos a lo que realmente interesa en este Cupra, su lado más salvaje. El propulsor 2.0 TSI que montaba la anterior generación (290 CV) ha superado la barrera física y moral de los 300 CV, un dato del que muy pocos vehículos no premium pueden presumir. Además de la mejora obvia de la potencia, los ingenieros han trabajado para conseguir un aumento de par máximo de 350 a 380 Nm entre 1.800 y 5.500 rpm. Todo eso se traduce en una aceleración de 0 a 100 km/h en 4,9 segundos (ST DSG 4Drive), 250 km/h de velocidad máxima limitada con un consumo declarado de 7,2 litros a los cien para ese mismo modelo. Si quieres saber todos los datos prestacionales puedes ver su ficha técnica.

Pero todos estos datos no consiguen expresar las sensaciones que desprende este Cupra durante su conducción. El control de chasis adaptativo y su dirección de asistencia progresiva permiten modificar el comportamiento dinámico, según las necesidades de la carretera y el conductor, a través del sistema Drive Profile. Para que el León más potente de la historia siga comportándose como todo un campeón de la estabilidad y firmeza, monta el diferencial autoblocante VAQ de tipo Haldex que se gestiona electrónicamente y se agradece enormemente al activar el último modo de conducción (Cupra).

Comportamiento

Durante nuestro trayecto hasta el Circuit de Castellolí (Barcelona) pudimos poner a prueba la funcionalidad de la versión ST DSG 4Drive. Un habitáculo realmente espacioso, un diseño cuidado, unas plazas traseras confortables y un maletero con 587 litros de capacidad muestran su lado más familiar. Su carácter es innegablemente deportivo pero en modo confort se puede circular sin prisas pero sin pausas con un nivel de insonorización y comodidad notable. Eso sí, el mejor Cupra florece en un puerto de montaña o en un circuito.

La lluvia no pudo con las ganas de los periodistas, que nada más llegar al circuito de Parcmotor pusieron al nuevo León Cupra en apuros. El terreno, muy deslizante por el agua dificultó la toma de contacto pero sirvió para demostrar que está para cualquier desafío, incluso intentar perseguir al Cup Racer de Jordi Gené. Al reducir nuestras expectativas de correr como locos pudimos experimentar la precisión de su dirección y la excelente labor del diferencial autoblocante, que funciona al milisegundo analizando el agarre de cada neumático. El propulsor se mostró copartícipe y nos facilitó el trabajo con una respuesta ágil desde los bajos y elástico hasta superar las 6.000 revoluciones por minuto.

Dicen que lo bueno y breve, dos veces bueno pero nosotros esperamos poder echar el guante a una unidad de pruebas para poder comentar mejor todos los detalles del nuevo León Cupra 300. Por ahora las sensaciones son muy buenas y más si le sumamos un precio de salida de 34.050 euros para la versión tres puertas y cambio manual. La versión familiar (ST) con cambio automático DSG-6 y tracción total 4Drive se sitúa en los 38.690€, un precio que lejos de ser accesible es realmente competitivo comparado con los modelos premium de sensaciones similares como el Audi RS3, Mercedes A45 AMB o incluso el Ford Focus RS.