Industria comercial

China propone la reducción de aranceles anunciada por Trump

El gobierno chino estudiará la proposición de reducción de impuestos del 40% actual hasta el 15%.

Planta de BMW en Carolina del Sur, Estados Unidos.

Planta de BMW en Carolina del Sur, Estados Unidos. / BMW

Àlex Soler

Àlex Soler

Una propuesta para reducir el impuesto a los coches fabricados en Estados Unidos importados a China del 40 al 15% ha llegado al gobierno del país asiático, que la estudiará durante los próximos días para tomar una decisión. Pese a todo, aún no está claro si se aceptará la medida, acordada entre Trump y Ji Xinping, presidente chino, en la cumbre del G20, sobre todo después de la detención en Canadá de Meng Wangzhou, directora ejecutiva de Huawei, a petición de Estados Unidos, hecho que ha resucitado las tensiones entre ambos países.

La tregua en la guerra comercial entre las dos potencias, que debería durar seis meses mientras negocian nuevas propuestas, ha peligrado por el incidente con la ejecutiva de la firma tecnológica. No obstante, como adelanta la agencia Bloomberg citando fuentes no identificadas, ambas partes parecen estar por la labor de mantener la tregua. La proposición de reducir los aranceles sobre los vehículos importados desde Estados Unidos es un paso que los mercados esperaban con ganas después de que el anuncio de la medida por parte de Trump en Twitter no fuera respaldado por ninguna declaración procedente de China.

La noticia ha sido bien recibida en las principales bolsas del mundo. BMW y Daimler AG, dos de los grupos más beneficiados por la decisión, porque de los 10 vehículos más vendidos en China fabricados en EEUU seis son Mercedes y BMW, están disfrutando de una subida significativa en el valor de sus acciones. En el momento de la redacción de este artículo, los bávaros registraban un incremento del 1,83% con un valor por título de 71,84 euros, aunque ha llegado del 3,3% alcanzando los 72,40 euros. Daimler registraba una subida del 2,09% con un valor de 47,04 euros por acción, pero ha llegado hasta el 3,7% durante la jornada. Volkswagen y Ford también han subido y Tesla, aunque ha empezado al alza subiendo un 1,8%, se ha estabilizado y cuenta con un incremento tímido del 0,20% con 365,85 dólares por acción, cerca del valor más alto de todo el año, los 370,34 dólares por título conseguidos tras el tuit de Musk anunciando la privatización de la marca en agosto.

Una tregua necesaria

China impuso el 40% sobre los coches fabricados en Estados Unidos el pasado julio para responder a los aranceles impuestos por Donald Trump al Gigante Asiático. Inmediatamente después, Daimler y BMW recortaron su expectativa de beneficios porque su precio en China se encareció y perdieron competitividad. Lo mismo le pasó a Tesla desplomándose un 70% en el mercado más grande del mundo para eléctricos y obligando a la empresa californiana a anunciar recortes en los precios. Según Reuters, la marca mantendrá los descuentos incluso si el país asiático retira los aranceles. A su vez, China vio como las ventas de vehículos caían por sexto mes consecutivo.

China le interesaría también que Estados Unidos redujera los impuestos sobre los vehículos producidos su territorio y exportados a América, que actualmente son del 27,5%, porque marcas como Geely o el Grupo GAC piensan internacionalizarse y expandirse hacia el mercado estadounidense.