Estas son las tres (difíciles) opciones para que un entierro salga gratis

Vivir es caro, pero morirse también

Coche funerario

Coche funerario / SPORT.es

Afrontar el fallecimiento de un ser querido es muy duro. En este caso, no estamos hablando solo emocionalmente, sino también en lo que se refiere monetariamente. Un entierro no es nada barato y su coste varía en función de la ciudad y de la comunidad autónoma.

A todo aquel que le haya tocado afrontar de cerca la muere de algún familiar y haya vivido de primera mano los costes que están asociados a este terrible suceso, sabe que hablamos de mucho dinero. Los costes de una ceremonia estándar, un entierro sencillo, alquiler del tanatorio y arreglos florales, son algunos de los gastos más costosos.

A continuación te mostramos tres opciones difíciles, pero posibles para que un entierro te salga gratis y lograr así reducir los costes para dejar la mayor parte del dinero para otras cuestiones obligatorias:

  1. Si la persona ha donado su cuerpo a la ciencia antes de morir. Este es un proceso largo y exigente, ya que hay condiciones para que las escuelas acepten el cadáver. Este tiene que estar casi impoluto: no se le pueden haber retirado órganos para ser trasplantados, ser extremadamente obeso o delgado o haber padecido una enfermedad infecta-contagiosa. Si se consiguen cumplir todos estos requisitos, el coste del entierro será solo el del traslado del cuerpo al centro universitario.
  2. A pesar de que el artículo 1.894 del Código Civil no permite desentenderse del coste del funeral hay una forma para poder hacerlo y es declararse insolvente. Para no pagar, todo el mundo que compone la familia (cónyuge, nietos, padres...) deberán declararse insolventes. Pero hay una excepción, los hermanos del difunto, que no están obligados a asumir estos gastos.
  3. Si la persona fallecida no tiene ningún familiar vivo conocido y nadie reclama el cadáver, también saldrá gratis el funeral, ya que lo sufragará el ayuntamiento.

Para todo lo demás, ¿cuánto hay que pagar?

El informe que la OCU de octubre de 2020 estima que de media un entierro cuesta 3.500 euros, pero aclara que hay enormes diferencias entre el coste del entierro dependiendo de las diferentes comunidades autónomas.

Este precio se ve incrementado, en caso de que no quieras optar por una fosa común, por el precio del nicho en el cementerio. La OCU estima el precio medio de un nicho "de entre 900 a 1.800 euros por un alquiler de diez años".

Por otra parte, incinerar es la opción más barata, con un precio medio de 605 euros y además, te ahorras el coste del cementerio. De nuevo, el precio de incinerar depende de la comunidad autónoma en la que se realice.

En cuanto al seguro de decesos, muchos ciudadanos ya lo tienen, de modo que la aseguradora se hace cargo de los costes en el momento del fallecimiento de la persona. Una cuota básica ronda los 12 euros por persona al año.

Sin embargo, los expertos recomiendan no adquirir estos servicios, ya que, de media, el cliente paga a larga de media cuatro veces más del coste de su proceso. Recomiendan apartar esos 1.000/3.500 euros en vida y legárselos a los familiares.