Los triples de Hezonja no tuvieron premio para el FC Barcelona en la final ante el Madrid

Ambos conjuntos salieron a estudiarse mutuamente, sin que ninguno tomara la iniciativa claramente. Lampe anotó el primer triple del partido (2-5), aunque Llull respondió pronto, dejando claro que el partido se iba a mover mucho por el exterior. El Barça no conectaba dentro con Ante Tomic, que además se fue pronto al banco con dos faltas. Sin el croata, el protagonismo fue para Lampe y un activo Satoransky, que gracias a un triple, devolvía el control del partido al Barça (10-12).

Hezonja también quiso hacer su primera aportación con un triple y parecía que los de Pascual, a pesar de los seis balones perdidos, aguantaban el tirón local. Pero el Madrid solo necesitó tres fogonazos consecutivos en triples de Sergio Rodríguez, Rudy Fernández y Nocioni, para abrir, casi de golpe, una renta de 10 puntos (27-17). Un duro revés para los azulgrana que lograron reducirlo a siete tras el segundo triple de Hezonja (27-20).

Los blancos necesitaban ese marcador favorable para sentirse cómodos ante un Barça que no acababa de arrancar, y que vio como los locales se iban de nueve tras canasta inicial de Nocioni (29-20). Había que remar de nuevo a contracorriente y entonces apareció Navarro, con un triple, que trataba de neutralizar al Madrid. Pero los de Pascual no encontraban la manera de hacer daño a los locales, que tenían suficiente con las penetraciones de Carroll –tres acciones consecutivas- y los puntos de Felipe en la zona y un Rudy Fernández con muchas ganas (12 puntos) lpermitían al Madrid dominar con comodidad el partido.

 Huertas acercaba al Barça con un triple (44-38) pero Rudy respondía de nuevo, para dejar el duelo al descanso con siete puntos de renta para los blancos (47-40). Los azulgrana no transmitían sensaciones demasiado positivas, faltos de energía y convicción para poder darle la vuelta al partido, aunque quedaba media parte por delante.

En la reanudación, un triple de Rudy devolvía la máxima renta al Madrid (50-40). El Barça reaccionó de la mano de Doellman, que con cinco puntos consecutivos, volvía a meter a los azulgrana en el partido. Aunque esa renta nunca lograban reducirla para poner dudas a los blancos. Al contrario. De nuevo, con mucha facilidad, el Madrid volvía a irse de 9 con canasta de Felipe, siempre atento a cualquier balón interior. Daba la sensación de que el equipo de Laso solo apretaba cuando necesitaba mantener las diferencias. En un mal cuarto de ambos equipos, el Barça solo reducía en un punto la diferencia (59-53).

El Madrid seguía controlando a placer y llegó a ampliar su ventaja a 11 puntos (66-55). Fue en ese momento cuando Mario Hezonja cogió la manija ofensiva del Barça y gracias a tres triples casi consecutivos,permitieron reducir la diferencia a solo dos puntos tras canasta de Tomic (70-68). Casi de un plumazo, los azulgrana se metían en el partido a tres minutos del final. Rudy Fernández se encargó entonces de defender al joven croata, y el Barça volvió a perder chispa y ni tan siquiera lograría igualar el duelo. Los árbitros señalaron una dudosa falta favorable a Rudy, que anotó dos tiros libres y volvió a abrir la diferencia a a cuatro. (74-70). Ya no hubo reacción posible. El Madrid sentenció en los tiros libres (78-72) y se impuso en el primer partido haciendo tan solo lo justo. El Barça deberá revolucionar mucho más sel segundo partido si quiere tener alguna opción de ganar en Madrid este domingo y no regresar con 0-2 al Palau en esta final de la Liga Endesa.