36 partidos, 36 victorias

Un póker de oro para la historia

El baloncesto femenino español ha derribado las puertas de la historia consiguiendo 4 oros en los 4 campeonatos de Europa disputados este verano por la selección absoluta, la U20, U18 y U16

Sergio Vera

Deberá pasar mucho tiempo para que el baloncesto español vuelve a vivir una gesta de tal calibre. 4 europeos, 4 oros. 36 partidos disputados, 36 victorias. Nuestras chicas ya son las reinas de Europa. Una auténtica locura que ha situado al baloncesto femenino de nuestro país en lo más alto. Todo comenzó en Orchies cuando la selección absoluta consiguió proclamarse campeona de Europa ante la todopoderosa Francia y ante su público por un ajustado 70-69 lideradas por el talento descomunal de Alba Torrens y la omnipresencia de Sancho Lyttle que, además, se convirtió en la MVP del campeonato siendo la máxima anotadora y reboteadora del torneo.

Las 'mayores' enseñaron el camino y el resto apuntó la hoja de ruta. Tomó el relevo la selección U20 dirigida por Anna Caula - técnica del Uni Girona - que se plantó en la final celebrada en Samsun (Turquía) ante Italia y no perdonó venciendo 59-53. Era el segundo oro y, de nuevo, otra trayectoria impecable. Astou Ndour con 18,6 puntos por partido y 8,9 rebotes por partido acabó como MVP de un torneo en el que Inma Zanoguera también integró el quinteto ideal.

Y de Turquía a Bulgaria. Allí las pequeñas guerreras de la U16 dieron toda una lección de trabajo y sacrificio para acabar coronándose campeonas ante la República Checa por 54-49. Secaron al mejor ataque de la competición en el partido decisivo gracias a una intensidad que les llevó a lo más alto. De nuevo oro y pleno de victorias para las chicas de Evaristo Pérez. En el apartado individual no se olviden de este nombre: Ángela Salvadores. La escolta leonesa también acabó como MVP y máxima anotadora del torneo con 16,6 puntos por partido.

Tan solo quedaba uno campeonato en la agenda y la U18 no falló. El equipo de Victor Lapeña puso el broche de oro a un torneo impecable cerrando el círculo que se abrió en Orchies y derrotando también a Francia por 60-46 en la final disputada en Vukovar (Croacia). La brillante generación del 95, con la MVP Leticia Romero a la cabeza, no falló para completar el verano mágico del baloncesto femenino español.

Unos éxitos que aseguran el futuro de nuestro baloncesto que, por otro lado, vive momentos más que complicados para poder mantener el nivel de la Liga Femenina en España. La cada vez más precaria situación de nuestra competición no hace justicia con el talento que ha situado a nuestras chicas en lo más alto. Mientras los oros relucen en verano, muchos de nuestros grandes valores se buscan la vida lejos de casa. Es sin duda la gran asignatura pendiente de un póker de oro que se ha convertido en leyenda.