Iniesta toma el mando

Hasta ahora, las circunstancias de la temporada habían permitido a Luis Enrique dosificar a Andrés Iniesta casi hasta el punto de convertirlo en un jugador ‘premium’: reservarlo para las grandes ocasiones, como quien se da un capricho en un restaurante de lujo, consciente de que no todos los días son festivos. Fruto de sus dos lesiones de rodilla y del reparto de minutos de su entrenador, Iniesta solo ha podido jugar dos encuentros completos, uno en la Champions (en el campo del Borussia de Monchengladbach) y otro en la Liga (Atlético de Madrid), pero a estas alturas del curso, y atendiendo al momento del equipo, su presencia se hace más necesaria que nunca para un Barça que más que disfrutar, sobrevive. Si hasta ahora Iniesta ha sido un jugador más de Champions que de Liga (269 minutos en el campeonato doméstico frente a los 214 que ya lleva en Europa), el plan del cuerpo técnico pasa por recuperar al jugador para recuperar al Barça. 

LA LIGA, PRIORITARIA

 Ahora que la Champions se toma un respiro –el Barça recibe mañana al Borussia en el Camp Nou ya con los deberes hechos y no volverá a jugar en competición europea hasta febrero de 2017-, Iniesta será un jugador mucho más habitual en las alineaciones de Luis Enrique. El clásico fue la prueba más evidente de que el Barça necesita la inspiración de Iniesta más que en ningún otro momento de la temporada. La prioridad es recortar distancias en la Liga, por lo que Iniesta jugará más partidos en el torneo de la regularidad. También tendrá minutos mañana en la Champions, ante el Borussia de Monchengladbach: el cuerpo técnico de Luis Enrique tiene previsto darle al menos una hora de juego para que el capitán recupere ritmo y rodaje. 

SU AUSENCIA, UN SINTOMA

En el reparto de minutos en la Liga, Iniesta ocupa el puesto 18º de la plantilla, con 269 minutos repartidos en seis partidos. Solo Alcácer (267 minutos), Cillessen (90) y Aleix Vidal (90) han participado menos en la Liga que Iniesta: el dato ayuda a completar el retrato de este Barça tan irregular en la Liga y con tantos problemas para sacar adelante sus partidos en el Camp Nou. El capitán es el centrocampista con menos minutos de la plantilla blaugrana. En la Champions, en cambio, Iniesta sube posiciones en la escala de los minutos disputados (es el 13º de la plantilla), síntoma de que Luis Enrique ha guardado al capitán para los partidos de mayor enjundia. Para el capitán del Barça, la temporada ha estado marcada por las lesiones: cayó lesionado en el primer partido oficial de la temporada, ante el Sevilla en la ida de la Supercopa, donde sufrió una distensión de la cápsula posterior de la rodilla derecha. Volvió a caer en Mestalla, con una lesión más grave, también en la rodilla derecha, la rotura parcial del ligamento lateral externo. En total, ha estado 62 días de baja (21 por la primera lesión, 41 por la segunda) que le han impedido tener continuidad y que han afectado directamente a la espina dorsal del equipo blaugrana.

SIN SUSTO

Sin Iniesta, el Barça ha sido menos reconocible: ninguno de los jugadores llamados a sustituirle ha logrado mitigar su ausencia: André Gomes ha tenido más oportunidades que Denis Suárez (913 minutos para el luso frente a los 794 que ha tenido el ex del Sevilla y Villarreal), pero ninguno ha sido capaz de conectar con los jugadores de ataque como lo suele hacer Iniesta cuando está en el campo.