No corren tiempos fáciles en el Emirates Stadium. Alegrías intermitentes, proyectos que ilusionan al iniciar la temporada y que acaban en decepción en mayo. La salida de Wenger, tan pedida por el aficionado ‘gunner’ en su día, no supuso un gran impulso para un Arsenal que no gana la Premier League desde la temporada 2003-2004. La de los ‘invincibles’. Sin perder un solo partido y con Henry en su pico de forma a la cabeza.

Arteta sigue generando dudas (leer noticia)