Walsh se reivindica con una clase magistral 'en casa'

Nadie en Inglaterra duda de la calidad de Keira Walsh. Pieza fundamental de la selección británica en la consecución de la Eurocopa el pasado verano y ‘MVP’ en la final de Wembley y en la Finalissima contra Brasil en el último parón internacional, la centrocampista de Rochdale volvió a su país para demostrar a todo el continente por qué fichó por el FC Barcelona.

Walsh fue la mejor jugadora del conjunto azulgrana en Stamford Bridge después de la goleadora Caroline Graham Hansen. Fue la guía del equipo en un partido que pedía calma a sus jugadoras cuando tenían el balón para no precipitarse en los ataques y que el Chelsea lo aprovechase para lanzar balones largos a la espalda de la defensa.

DUEÑA DEL CENTRO DEL CAMPO

Realizó, Walsh, 55 intervenciones y completó con éxito 54 pases (un 94,7%). Fue la jugadora del Barça con más recuperaciones tras pérdida y entendió lo que necesitaba el equipo para reiniciar los ataques. Mostró esa versión de pivote que caracteriza el estilo azulgrana.

FELIZ Y APLAUDIDA

“Me he sentido muy bien y con confianza”, explicaba a SPORT al término del encuentro, “creo que el hecho de estar de vuelta en Inglaterra, con mi gente y mi familia que pudieron venir al partido ha sido un aliciente”. 

Cuando los altavoces de Stamford Bridge pronunciaron su nombre, Keira se llevó una ovación de la grada -también Lucy Bonze-. 

Y es que centenares de aficionados británicos no quisieron perderse la oportunidad de ver en directo a dos de sus jugadoras favoritas en unas semifinales de la Champions con el Barça y en ‘su casa’. Walsh no pudo elegir mejor escenario para reivindicarse.

“La manera en la que hemos jugado en la segunda parte es todo lo que necesitaba el equipo para mantener la superioridad”, explicaba. Yañadió: “Me fui sintiendo mucho mejor en el equipo después de las Navidades. Todas mis compañeras me han ayudado en mi adaptación y jugar con grandes futbolistas como Patri, Aitana o Mariona en el centro es un privilegio”.