Hazard, el gran chasco en el Real Madrid

Eden Hazard ha dejado de ilusionar a la parroquia madridista. Muchos piensan que su fichaje ha llegado demasiado tarde y por un precio excesivo. Su primera temporada ha sido un chasco en toda regla y no por sus pobres estadísticas, si no por adolecer de esa magia que rodeaba a su fútbol. El belga ha mostrado su talento con cuentagotas más allá de refugiarse en las lesiones para justificar sus paupérrima aportación, un gol y cuatro asistencias en 20 partidos de titular. Hazard no ha convencido a nadie en un año gris que ha devaluado su imagen y su precio.

Fue fichado para solucionar los problemas atacantes blancos. Un equipo que había perdido la pegada con la salida de Cristiano, un ataque que pasó de marcar una media de dos a tres goles por partido por temporada con el portugués y que pasó a 1,89 goles por partido el año pasado. Hazard llegó para paliar esas cifras, pero apenas han mejorado con él, con Jovic y con Rodrygo, los nuevos, además de Benzema, Mariano, Vinicius y Asensio. Entre todos, la media de goles esta temporada ha sido 1,94 goles por encuentro, demasiado poco para tanta ‘realeza’. Tal es así, que Zidane cambió la mentalidad ofensiva por disciplina defensiva, no encajar primero y marcar después.

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Hazard no ha encajado en los esquemas ofensivos del Real Madrid. Lo peor es que en enero entrará en la treintena y si le ha costado rendir este curso el reto se complica. La edad disminuye la resistencia, la velocidad y la potencia, condiciones que se aliaban con su fútbol al que dotaba de malabarismo en el uno contra uno. Una lesión en su tobillo derecho ha mermado esa habilidad para convertirse en un jugador previsible y hasta vulgar. Es cierto que una sucesión de lesiones ha condicionado su rendimiento, pero no es una excusa porque cuando no estuvo lesionado, tampoco dio la talla.

La consecuencia es que el Real Madrid no ha rentabilizado una inversión de 100 millones de euros, el segundo fichaje más caro en la historia del club. Su precio de mercado pierde 40 millones, se ha devaluado de los 120 a los 80. Hazard ha pasado de ser incuestionable a cuestionado por su pobre aportación. Un jugador que marcaba diferencias en el Chelsea pero que en el Madrid ha sido incapaz de repetir ese papel. El madridismo teme que de no recuperar su mejor versión acabe taponando la explosión de Vinicius, un jugador diferente que necesita continuidad para crecer. El brasileño ha sido más decisivo y sí es capaz de desequilibrar por la izquierda. Pero Zidane es hombre de ideas fijas, de los que sacrifica lo que haga falta cuando cree en un jugador y Hazard le ofrece más credibilidad que Vinicius. De momento…