Camavinga, un centrocampista para el futuro

Eduardo Camavinga está siendo uno de los jugadores más destacados de la liga francesa y ha captado la atención de muchos de los equipos grandes de Europa. Nacido en Miconje (Angola) lleva en el Rennes desde 2013. 

Se ha hecho con el puesto de titular en el equipo de Julien Stéphan actuando, casi siempre, como pivote defensivo. Esta temporada ha sido la de su explosión, pese a tener únicamente 17 años. Ha marcado un gol y ha dado una asistencia. Tiene una precisión de pase del 86% y un índice de regates logrados del 67%, algo poco habitual para la posición que ocupa. Es un centrocampista moderno con calidad y criterio para jugar el balón. Además de una capacidad defensiva muy buena como demuestran sus números: 27 despejes, 34 intercepciones y 60 entradas con éxito. 

El Real Madrid lleva dos años siguiendo su progresión y han puesto los ojos en él para que sea el relevo de Casemiro. Zinedine Zidane no cuenta con un sustituto de garantías para el brasileño, cuando ha faltado la posición ha sido ocupada por Fede Valverde que al tener que ser más posicional no puede presionar ni desmarcarse hacia los costados y el equipo pierde dinamismo.

El cuadro de Zidane no es el único que se ha fijado en Camavinga, el Paris Saint-Germian y el Borussia Dortmund también estarían interesados en contratarle para sumar más centrocampistas de calidad a sus plantillas. Ha obtenido la nacionalidad francesa, lo que facilita su llegada a cualquier equipo ya que no ocuparía plaza de extracomunitario. Ya debutó con la sub21 de los galos.

El Rennes podría sacar una cantidad muy importante por su traspaso. Transfermarkt, la web especializada en datos sobre los jugadores, le otorga un valor de mercado de 35 millones de euros pero el conjunto francés podría sacar bastante más por la joya de su cantera que finaliza contrato en 2022.

Su llegada se uniría a la de Vinícius, Rodrygo, Reinier, Brahim, Kubo y Odegaard en la apuesta del equipo madridista de apostar por el talento joven.