La única posibilidad de ganar al Bayern

Todas las encuestas habidas y por haber, las amigas y las enemigas, predicen que el Barça tiene muy poco que hacer esta noche en Múnich. Es el reflejo del estado de ánimo del barcelonismo, preso de la realidad de un equipo que no da la talla.

Y es verdad, por fútbol, el Barça no tiene mucho que hacer. El Bayern tiene mejores individualidades, mejor conjunto, mejores condiciones físicas, una plantilla más equilibrada... No hay más que ver la situación de unos y otros y los marcadores de los dos últimos enfrentamientos entre ellos. 

El declive del Barça ha ido paralelo al crecimiento y consolidación del Bayern. Todo lo que se ha hecho mal en el Barcelona, fundamentalmente los fichajes y la renovación de la plantilla, se ha hecho bien en el club muniqués. Las encuestas así lo reflejan. El Bayern está muy bien y el Barça, muy mal.

Pero hay una variable que va más allá del fútbol y que no reflejan las encuestas, la única posibilidad de que el Barça pueda ganar esta noche. Me refiero al carácter y personalidad de los jugadores. Es una rendija que se abre por las circunstancias en la que se juega el partido. No es que los alemanes no tengan carácter, es que los alemanes no se juegan nada y en su subconsciente puede anidar la ausencia de un estímulo y la prudencia por evitar riesgos de desgaste y lesiones.

Es humano y no sería la primera vez que pasara. Y al contrario, los barcelonistas no tienen elección, han de ser valientes, contundentes, intensos, agresivos, duros, han de correr hasta la extenuación, meter el pie, anticiparse a los rivales... solo así se puede igualar el déficit futbolístico. Carácter y orgullo. Es su última oportunidad de demostrar que merecen vestir la camiseta del Barça.