Una liga para equipos bien armados como el Atleti

Dembélé sufrió un golpe en el hombro en el partido del Barça ante el Atlético

Dembélé sufrió un golpe en el hombro en el partido del Barça ante el Atlético / EFE

Jordi Cruyff

Jordi Cruyff

El gol del Atlético de Madrid llegó cuando más duele, al filo del descanso. Y uno de los fuertes del equipo del Cholo Simeone es precisamente aguantar un 1-0. Saben manejar casi a la perfección una mínima ventaja con el reloj, hasta el punto de dejar al rival perdido como le ocurrió al Barça. Hasta entonces, fue una primera parte que apuntaba a un típico partido de 0-0, con el Barça gozando de más control y ofreciendo más peligro por la banda de Dembélé, que sigue acercándose al potencial de su calidad. Pero varios errores en cadena dejaron al conjunto azulgrana a merced de los colchoneros y concediendo demasiado tiempo para encajar el 1-0.

Este partido vino reforzar la idea de que el equipo se enfrenta a una transición muy dura, acentuada por la crisis del Covid-19. Ronald Koeman fue muy claro cuando identificó dos posiciones a reforzar que al final no fueron cubiertas: el gol y evitar el gol. Cada vez que un central sale del campo cojeando, tiembla el barcelonismo. La baja de Gerard Piqué supone un gran contratiempo. Y Memphis Depay tenía sentido para ampliar las opciones ofensivas, pero de haber contado con un presupuesto holgado, el técnico holandés seguramente hubiera apostado por un delantero, ese referente que sabes que está cerca del área cuando haces un centro. Aunque ahora mismo el mercado no anda sobrado de rematadores brutales como Haaland.

El Barça no es el único equipo que está sufriendo el impacto de la crisis del coronavirus. No solo en lo económico, también en lo deportivo con partidos marcados por giros imprevisibles. Estamos viendo alteraciones en la hoja de ruta de grandes clubes y el Real Madrid, sin ir más lejos, tampoco es ajeno a estas turbulencias. En el caso del conjunto culé, toca asumir, aunque cueste, que habrá altibajos, pero también valorar en su justa medida que jugadores y cuerpo técnico están haciendo un esfuerzo encomiable en un año difícil.

Esta liga va a ser abierta, al igual que lo fue la temporada pasada hasta que el Real Madrid se acabó imponiendo con su solidez defensiva tras el confinamiento. Pero sí veo al Atlético de Madrid como un candidato fuerte al título. Está mostrando que sabe a lo que juega, es un equipo muy trabajado gracias al sello de su entrenador. Y cuenta con la ventaja de una plantilla con bastantes recambios de buen nivel cuando todos sus futbolistas están en forma. Si uno baja el rendimiento, sabe que hay un sustituto que le quitará el puesto. Y sin la dependencia de un solo delantero, porque apenas se hizo sentir la baja de Luis Suárez. En una temporada tan complicada con tantas lesiones y el desgaste físico que están suponiendo los parones de las selecciones, la clave de esta liga será tener equipos bien armados. Y el Atleti, lo tiene.

ME GUSTA: La goleada de España contra Alemania. Llegó precisamente en el mejor momento cuando era necesario un llamamiento a la calma. No era conveniente alarmarse por las dudas, ni tampoco ahora volverse locos con seis goles contra un gran rival europeo. Pero en esta particular transición de La Roja, venía bien una alegría para reafirmar la línea de trabajo de Luis Enrique.

NO ME GUSTA: Positivos de coronavirus en el parón de selecciones. Las federaciones y los propios jugadores deben tomar extremas precauciones para evitar casos como el de Uruguay. Es normal que los largos desplazamientos pongan a los clubes en alerta, pero afortunadamente han sido mayoría los buenos ejemplos en compromisos del fútbol internacional que deben seguir adelante, como las ligas domésticas.