Setién seguirá con el apoyo de la plantilla

Setién dijo que su relación con los futbolistas es buena

Setién dijo que su relación con los futbolistas es buena / FCB

Lluís Mascaró

Quique Setién está viviendo los tres meses más intensos y, seguramente, apasionantes de su vida. Ha pasado de estar paseando con las vacas por su pueblo a sufrir un confinamiento en Barcelona por culpa del coronavirus. Por no hablar de todo lo que le ha sucedido en su breve etapa como entrenador blaugrana: desde perder y recuperar el liderato de LaLiga a quedar eliminado de la Copa, pasando a los pitos por el juego del equipo y las pañoladas contra Bartomeu por el caso de las redes sociales. Todo esto lo ha asumido Setién con esa flema cántabra que está marcando su primera etapa en el banquillo del Camp Nou. Es verdad que el nivel futbolístico del equipo está muy lejos de las expectativas creadas con su mensaje, pero el técnico se ha ganado la confianza de los jugadores y, lo que es más importante, del presidente Bartomeu.

Por eso, pase lo que pase a partir de ahora, Setién seguirá la próxima temporada. De hecho, ya está planificando la plantilla junto a la dirección deportiva del Barça. La situación generada por la pandemia ha tenido mucho que ver con la decisión de darle continuidad. Nadie sabe lo que pasará en los próximos meses. Las previsiones más optimistas apuntan a que las competiciones podrían reanudarse a mediados de mayo, pero la realidad a la que estamos siendo sometidos durante estos seis primeros días de confinamiento parecen indicar unos pronósticos mucho más pesimistas.

Sea como sea, se reprendan o no la Liga y la Champions, Quique Setién estará al frente del equipo la campaña 2020-21. Un equipo que necesita muchos retoques, con fichajes que deberán llevarse a cabo en un mercado absolutamente convulsionado por el COVID-19. Y, por supuesto, con Neymar y Lautaro como principales objetivos para revolucionar la plantilla. Pero ya es otra historia. De la que ya hablaremos otro días. Porque nos quedan, me temo, muchos días de cautiverio y teletrabajo por delante...