Cuando se quiere fichar y... no se puede

Ronald Koeman, entrenador del FC Barcelona

Ronald Koeman, entrenador del FC Barcelona / FCB

L. Miguelsanz

L. Miguelsanz

El mundo del fútbol vive momentos muy complicados económicamente y el Barça, en particular, tiene una situación agónica que marcará la política deportiva en un verano en el que no se pueden esperar grandes sorpresas. El área deportiva vive con la angustia de querer fichar y no poder. Porque de lo que se trata ahora es de sacar el máximo número de futbolistas posibles para abaratar costes salariales sin tener la seguridad de poder hacer alguna operación de fichaje interesante.

Es evidente que lo están intentando a través de intercambios casi imposibles, pero la realidad es que pocos clubs quieren a los descartes del Barça. Primero, por edad, pero sobre todo porque cobran sueldos irreales y que ya nadie los paga en el mundo del fútbol. Ni el City ha sido capaz de interesarse por algún jugador blaugrana porque, claramente, no le interesa colocar según qué fichas en su plantilla que solo harían que desestabilizar a sus propios vestuarios.

El Barça de Bartomeu jugó por encima de las posibilidades y cuando todo se paró por la pandemia, el castillo de naipes ha acabado derrumbándose. Aquí solo queda apostar por la cantera e intentar acertar en apuestas internacionales que puedan explotar en el Camp Nou. Hoy por hoy, salvo alguna venta inesperada, el Barça no está para firmar a grandes estrellas. 

En lo que se está ahora es en dejar salir antes que entrar. Y en los días previos a la pretemporada pasarán muchas cosas duras con algunos futbolistas que parecían intocables. Son situaciones desagradables, pero el club no tiene otra solución que enseñar la puerta de salida a varias de las vacas sagradas con la esperanza de comenzar una nueva era económica y deportiva. Y es casi cuestión de supervivencia.

En épocas pasadas ya salió bien la apuesta por los chicos de La Masia arropados por cracks. El Barça tiene al mejor jugador del mundo y debe aprovecharlo para que los futbolistas crezcan a su lado. Si Messi renueva por dos años, el crack argentino será clave para construir un Barça ‘low-cost’ de futuro.