Piqué no puede jugarlo todo

Piqué lo está jugando todo esta temporada

Piqué lo está jugando todo esta temporada

Lluís Mascaró

Lluís Mascaró

Piqué no puede jugarlo todo. No debe jugarlo todo. No es bueno ni para él ni para el Barça. Hasta ahora, ha disputado todos los minutos de todos los partidos del equipo blaugrana. Un total de 990 minutos en 11 encuentros. Una auténtica barbaridad. Más si tenemos en cuenta que estamos a principios de temporada y que la condición física de los futbolistas (la de Piqué y la de todos) no es la más idónea para este tipo de esfuerzos.

Piqué, además, ha tenido la mala fortuna de salir ‘retratado’ en casi todos los errores defensivos que ha cometido el conjunto blaugrana en este arranque de competición. Unos han sido culpa exclusivamente suya. Otros, fallos como consecuencia de los desajustes generales del sistema defensivo.

Entre la sobredosis de minutos y la presión por los excesivos goles encajados, Piqué ha estallado. Lo hizo el domingo, tras el empate en Valencia: “Hay mucha gente que me espera y me tiene ganas. Se ha puesto de moda que cada vez que recibimos un gol, la culpa sea de Piqué”. Más allá de entrar a valorar el mensaje a los medios de comunicación, la frase se entiende desde el cansancio físico y mental del futbolista.Piqué necesita un descanso. Y no por jugar mejor o peor. Simplemente porque lo necesita. Pero no puede descansar. Porque no tiene relevo. 

Futbolistas tan insustituibles como Messi o Sergio Busquets han jugado menos minutos que Piqué. Han podido entrar en las rotaciones. Aunque sea en cuentagotas. El central, ni eso. La lesión de Umtiti (la extraña lesión, por cierto, ya que todavía no existe un parte médico que concluya cuándo puede volver a la competición) ha empeorado las cosas. La baja del francés la ha cubierto Lenglet. Pero Vermaelen no puede hacer lo mismo con Piqué.

El salto cualitativo es demasiado grande. Un abismo. Por eso el Barça, con buen criterio, ha empezado a buscarle un relevo a Piqué. El escogido parece ser De Ligt. Un central joven, muy joven (solo tiene 19 años), que está llamado a ser uno de los mejores de Europa. Justo lo que necesita el Barça para dar descanso a Piqué.

El catalán sería el mejor maestro del holandés. Y el holandés, el mejor aprendiz del catalán. Pero esto no podrá ser hasta la próxima temporada. ¿Y mientras tanto? Rezar para que Piqué recupere pronto su mejor nivel y, sobre todo, no se lesione. No queda otra...