El peligro es para el Tottenham

Mauricio Pochettino comparece en rueda de prensa antes de enfrentarse al Barça

Mauricio Pochettino comparece en rueda de prensa antes de enfrentarse al Barça / AFP

Albert Masnou

Albert Masnou

Después de unos resultados adversos, el Barça parece que vaya a Wembley a con la soga en el cuello. Dos empates y una derrota le habrían dejado tocado. Aparece en la sala de prensa un Valverde cabizbajo (“Ha sido una semana dura”, admitió), sin transmitir un  mensaje claro y, lo que es peor, dando la impresión de estar en manos de la voluntad de unos jugadores que mandan más que el presidente.

Con traje enseñando tobillos, estos llegan a Londres con aires de suficiencia, lejos de la preocupación que se respira en el entorno. Son dos mundos que no siempre parece que coinciden. Sin embargo, ahora hay un elemento en común: Quien realmente se juega mucho en este encuentro de Champions no es el Barcelona sino el Tottenham. Una nueva derrota le dejaría groggy. Llega, además, con la duda en el cuerpo por no poder contar con medio equipo titular.

¿Qué pasaría si, por contra, el Barça pincha? En realidad, poco o nada. Esto es una carrera de fondo. En otras épocas, los equipos de Guardiola o Luis Enrique también vivieron semanas duras sin que acabara afectando los resultados finales de la temporada. Todo está en manos de los jugadores y los que son del gremio del vestuario, como Rakitic, sí envían un mensaje claro de que Wembley es el escenario ideal para “demostrar que somos muy buenos”.

El problema del Barça es de actitud de los jugadores y ellos parecen seguros de que pronto llegará el clic. Los signos que llegan son de tranquilidad: No se esconden en las redes sociales ni Messi en la sala de prensa. Todo parece normal. Solo es cuestión de esperar a ver qué si Wembley les apetece tanto como Butarque.