Opinión

Nadal y un cambio de discurso que acerca más que nunca su final

El tenista español Rafa Nadal durante la rueda de prensa posterior al entrenamiento realizado este miércoles en la Caja Mágica donde ya prepara su participación en el Mutua Madrid Open

El tenista español Rafa Nadal durante la rueda de prensa posterior al entrenamiento realizado este miércoles en la Caja Mágica donde ya prepara su participación en el Mutua Madrid Open / EFE

Su regreso en Barcelona volvió a encender todas las esperanzas, sobre todo en vistas a la gran cita de Roland Garros. Pero tras la derrota ante De Miñaur y antes de su estreno en el Mutua Madrid Open, Rafa Nadal ha vuelto a rebajar toda la euforia y esta vez, de una forma como nunca antes había hecho.

Tras entrenar nuevamente en las pistas de La Caja Mágica, Nadal compareció en rueda de prensa y en sus primeras respuestas ya dio buena prueba de que su discurso había cambiado al de una semana atrás en Barcelona. Allí dejó entrever en varias ocasiones que era su última presencia en el torneo, pero siempre con la premisa y la ilusión de competir y dar el máximo nivel.

En cambio, ahora en Madrid, el discurso ha sido mucho más claro. Ha asegurado de forma tajante que esta será su última participación y ya en la primera respuesta ha dejado claro que dará lo que pueda, remarcando que si sale a competir es porque se trata del torneo más especial y en el que más cariño ha sentido en toda su carrera. De hecho, más claro no ha podido ser cuando por sorpresa de todos ha confesado que de llegar así a Roland Garros, "yo no salgo a la pista".

El cambio de discurso ha sido evidente, tanto, que incluso ha llegado a restar importancia en el hipotético caso de que no compita en París. "Saldré a jugar allí si me siento capacitado para salir a jugar bien. No se acaba el mundo con Roland Garros, aunque ha sido el torneo más importante de mi carrera" ha asegurado.

Un discurso que hace evidente que su retirada está más cerca que nunca y que como bien ha evidenciado, este será su último paso por los torneos que tengan el placer de verle competir. Incluso se ha atrevido a hablar de un posible homenaje del torneo, algo que había evitado a toda costa en ocasiones pasadas. "Homenajes o no, soy una persona tranquila no soy una persona muy dada a grandes cosas. Las cosas naturales, con tranquilidad y cada lugar decidirá lo que tenga que hacer como ellos lo sientan".

Sea como sea, Nadal ha dejado claro que el tiempo se acaba y que con la confirmación de Laver Cup, en lo que todo apunta a ser una despedida al más estilo Federer, solo hay una cita en la que piensa estar sea como sea. Los Juego Olímpicos son sin duda su gran atracción y hoy, lo ha vuelto a reiterar. "Hay Juegos por delante y diferentes formatos que me hacen ilusión" ha sentenciado en un claro aviso que más allá de intentar competir de manera individual, puede que haya alguna sorpresa final en forma de pareja.

Su discurso no ha podido ser más claro. A Nadal le queda menos que nunca para decir su adiós final.