Messi, omnipresente en todo el juego

Messi consiguió un doblete

Messi consiguió un doblete / AFP

Pichi Alonso

Pichi Alonso

El Barça se redimió de la mano de un Messi que dio muestras de por qué dijo que este año la Champions es su competición. El argentino mandó, ordenó, creó de centrocampista, asistió a sus compañeros en las jugadas claves y  fue protagonista constante en el juego del equipo. El equipo actuó con contundencia en los primeros minutos, dos goles en las dos primeras llegadas. El segundo tanto mató al Tottenham, que había tenido mucha posesión, aunque sin llegar a crear peligro. A partir del 0-2, el conjunto de Valverde dominó por completo el resto de la primera mitad. En ese tiempo, Arthur estuvo bien en la circulación de balón; Rakitic, que no anduvo fino al inicio, luego estuvo mucho mejor en la izquierda y, lo más importante,  es que defensivamente el equipo dejó de dar facilidades como en los partidos anteriores.

Superlativo Messi

Si en la primera mitad el mejor jugador del conjunto blaugrana fue claramente Messi, en la segunda se superó nuevamente. El crack argentino estuvo omnipresente, apareciendo en todas las facetas de juego. Al igual que en la primera parte, el Barcelona siguió dando la sensación de mucha superioridad, pero los ingleses mantuvieron vivo el encuentro con su gran actitud sobre el terreno de juego, no dando el brazo a torcer en ningún momento pese a ir siempre por detrás en el marcador. Pero pese a la tenacidad de los hombres de Pochettino por seguir vivos, era un Messi estratosférico y superlativo quien hizo temblar Wembley. Pese al resultado final, sufrió en exceso el Barça para ‘matar’ un definitivamente partido que debió quedar resuelto con mucha más antelación.