Mejor en el juego y peor en ataque

El partido del Barça en Lyon dejó tantos interrogantes como motivos para la esperanza. La sorprendente falta de gol contrastó con el buen juego del equipo. Y todos acabamos con la sensación de que este Barça puede ofrecer mucho más de lo que se vio en el campo del Olympique. Que fue mucho desde el punto de vista futbolístico...

El 0-0 final acabará siendo anecdótico en función de lo que suceda en el partido de vuelta del 13 de marzo en el Camp Nou. Porque, visto lo visto en el encuentro de ida, es de esperar que los blaugranas sean capaces de ganar a los franceses sin demasiados apuros... Aunque para ello habrá que afinar la puntería: el Barça solo ha marcado dos goles (uno de ellos de penalti) en los últimos cuatro partidos que ha disputado. Un ridículo promedio de 0,5 tantos por encuentro que, teniendo la delantera que tienen los blaugranas, no tiene ningún sentido. 

RECUPERAR EL ESTILO

Lo realmente importante fue comprobar cómo el Barça es capaz de recuperar su estilo si Valverde apuesta por los futbolistas que saben ejecutarlo. Y en este caso concreto considero un gran acierto haber elegido en la Champions a Sergi Roberto como sustituto del lesionado Arthur en lugar de Arturo Vidal. Fue una declaración de intenciones del entrenador que acabó visualizándose en un buen partido de los blaugranas.

Ese es el camino (el único camino) para ser campeón. La falta de gol es solo una (peligrosa) racha pasajera que se solucionará por sí sola en el momento en que Luis Suárez y Messi recuperen su instinto ‘asesino’.