Solo La Masía puede salvar a Xavi (y al Barça)

Pau Cubarsí durante una jugada en el Vilamarín

Pau Cubarsí durante una jugada en el Vilamarín / Valentí Enrich

Ernest Folch

Ernest Folch

Preguntado por La Masia, Xavi pronunció en la previa una gran verdad: “la cantera es un tesoro”. Y añadió: “Con ella estamos siendo valientes.” Pues en esto, como se vio contra el Betis, Xavi tiene toda la razón del mundo.

Los hechos ratificaron plenamente sus palabras: después de varias semanas de dudas, decepciones y mucho ruido ambiental, Xavi sacó por fin lo mejor de si mismo y se plantó en un campo respetable como el Benito Villamarín con dos adolescentes de 16 años: Lamine Yamal y Pau Cubarsí, este último en su debut es primera división. Esto sí es verdadero y genuino cruyffismo. El Barça tuvo por fin un arranque de partido tranquilo, dominó la primera parte a placer y fue otra vez un equipo estable y reconocible. Con esta regeneración tuvieron mucho que ver los dos niños. Lamine Yamal generó siempre una gran inestabilidad, dejó al Villamarín mudo con un palo estremecedor tras un ‘slalom’ excelso y su enésima incursión letal provocó el segundo gol de Ferran. Cubarsí jugó un partido imperial, sin cometer un solo error ni perder nunca la posición y sacando siempre el balón como si ya hubiera jugado cuatro finales de Champions. El jovencísimo central no solo cortó acciones muy peligrosas del Betis sino que impresionó por su impecable juego de toque.

Es lo que tiene la Masía: bien gestionada, ofrece caviar futbolístico premium a precio de risa. Tras una crisis importante, que ha sacudido al equipo y a la institución, el partido contra el Betis puede, y debería ser, el auténtico punto de inflexión que el equipo estaba buscando, pero para ello es necesario que se entienda qué es lo que sucedió en el Villamarín. Porque en esta temporada tan irregular, Xavi ha vacilado en muchos momentos, pero sin duda lo mejor que ha hecho es creer en la cantera y apostar por jugadores muy jóvenes en momentos complicados. En esto el entrenador blaugrana sí que ha sido audaz y sí que está construyendo algo muy valioso de cara al futuro.

Lo cierto es que el Barça tuvo que lidiar ayer con sus propios fantasmas, cuando vio que el Betis le igualaba absurdamente un partido que iba ganando 0-2, algo que ha sido una constante toda la temporada. Pero esta vez respondió a la adversidad con inteligencia, y un gol prodigioso de Joao Félix, seguido de un contraataque eléctrico de Ferran para completar un gran hat-trick, hizo justicia a uno de los mejores partidos del Barça de este curso.

Lo mejor del partido es que enseña el camino a seguir, que no es otro que combinar el talento con La Masia, el comodín eterno que nunca falla. Xavi puede escoger ser el entrenador disperso que se obsesiona con las críticas de la prensa, o puede escoger ser este magnífico y atrevido impulsor de los jóvenes, su gran obra y su única tabla de salvación posible. Una vez más, quedó claro que lo único que sacará al Barça de la ruina es el tesoro de La Masía, como muy bien lo bautizó el propio Xavi. Cuando ficha el Barça suele ser torpe, vulgar y malgastador. Produciendo talento es único en en el mundo. ¿Lo aprenderemos de una puñetera vez?