¿Ganar la Liga para ganar la Champions?

Messi lo dejó muy claro en su primer discurso como capitán: el gran objetivo de esta temporada es la Champions. Después del doloroso KO de la pasada campaña ante la Roma, el crack blaugrana se siente en deuda con la afición. Y con él, entiendo, todos los jugadores. Incluso, por supuesto, el entrenador. Pero Valverde es muy prudente. Y en la rueda de prensa previa al inicio de la Liga volvió a evidenciarlo: “El camino que tenemos para ganar la Champions es ganar la Liga”. El técnico, por lo tanto, no prioriza la Copa de Europa porque, según sus palabras, “si eres el mejor durante todo el año es más fácil conseguir tus objetivos”.

Una afirmación que, sin duda, contrasta con las cuatro Champions que ha conquistado el Madrid en cinco años. Los blancos, en este periodo, solo han ganado una Liga. O sea que, por mucho que se empeñe Valverde, lo de priorizar la Champions para que sea más fácil ganarla es una realidad contrastada. Otra cosa es que resulte políticamente correcto admitir que hay un objetivo principal. Al Barça, claro, se le exige todo. Aunque los culés (la mayoría) están dispuestos a estas alturas de la película a renunciar a todo por la Copa de Europa. No nos engañemos. Es el título DESEADO. Así, con mayúsculas.

El Barça ha fichado talento (Arthur), velocidad (Malcom), seguridad (Lenglet) y competitividad (Arturo Vidal) no para luchar por la Liga, sino para luchar por el objetivo mayor que es la Champions. Se ha reforzado en todas sus líneas (aunque ha perdido la magia de Iniesta) pensando, exclusivamente, en la dificultad de la Copa de Europa. Hay quien dice que, con Arturo Vidal en Roma, el Barça no habría sido eliminado. Puede ser. Pero ahora lo que interesa es que no se repita una decepción como aquella. Sin perder de vista la Liga que arranca hoy. Pero soñando cada día, cada noche, con levantar la Copa de Europa en el Wanda Metropolitano.