Opinión

El fútbol se ha convertido en un problema de estado, se busca presidente

Peligra el Mundial 2030 y la FIFA estudia intervenir la federación

Luis Rubiales.

Luis Rubiales. / EP

La próxima semana será de traca en la Federación Española de Futbol. Mas escándalos garantizados. Saldrán audios incriminatorios del ex presidente donde quedará claro que era un comisionista de segunda traficando con negocios turbios. Aparecerán nuevos casos de corrupción que pasarán a engrosar la lista de denuncias que investiga el Juzgado. Y el regreso de Rubiales de la República Dominicana se convertirá en un show ya que será detenido tan pronto pise suelo español en Barajas. Todo bajo la atenta mirada de UEFA y FIFA que estudian la posibilidad de intervenir la Federación en quince días si antes no se convocan oficialmente unas elecciones que llevan cinco meses de retraso.

El fútbol se ha convertido en un problema de estado por obra y gracia de Rubiales. La imagen de la Guardia Civil registrando la Federación fue nefasta. Peligra la organización del Mundial 2030 que se debe adjudicar el diciembre. La imagen del deporte rey ha tocado fondo. El Gobierno de Sanchez, que durante dos años miró hacia otro lado protegiendo a un impresentable, ha llegado a la conclusión de que toca hacer limpieza a fondo dando órdenes al CSD para tomar medidas ejemplares.

El Tribunal Administrativo del Deporte (TAD) puede inhabilitar al presidente de la Gestora, Pedro Rocha, un mandado de Rubiales que tiene las manos sucias y los bolsillos abiertos. De nada le servirán las últimas decisiones en las que pretende romper con el pasado para salvar su silla. Ceses que llegan seis meses tarde, periodo en el que ha cobrado el mismo sueldo que Rubiales aunque tuviera un cargo provisional. Otra ilegalidad.

Se busca presidente para la Federación Española, corruptos abstenerse. Pedro Rocha debería estar descartado por formar parte de la banda de su antecesor. Como vicepresidente económico de Rubiales no puede eludir responsabilidad y culpa. Se mire por donde se mire, por omisión o por participación, es culpable de los delitos que imputan a su ex jefe. Es cuestión de buscar presidenciables con prestigio, conocimientos y experiencia en el mundo del fútbol. Personalidades de acreditada profesionalidad, como por ejemplo Mateu Alemany que ha sido presidente del Mallorca, director general del Valencia y director deportivo del Barça. Hay que encontrar candidatos de este perfil capaces de hacer borrón y cuenta nueva en la casa del futbol.

En la Federación Catalana de Fútbol las cosas se han hecho igual de mal, se acumulan los escándalos. Los Mossos de Escuadra han registrado la Federación. El secretario general acusa ante los jueces a Joan Soteras. El presidente encadena denuncias por corrupción. El Juzgado de instrucción 2 de Sabadell investiga la manipulación y compra de votos en las últimas elecciones. El cerco se va estrechando y Soteras no tiene otra salida que la dimisión.