Un equipo valiente e intratable en la Liga checa

Los jugadores del Slavia celebran el pase a cuartos ante el Sevilla

Los jugadores del Slavia celebran el pase a cuartos ante el Sevilla / EFE

Pichi Alonso

Pichi Alonso

El FC Barcelona tiene delante la posibilidad de obtener la clasificación matemática, si es capaz de vencer en sus dos compromisos consecutivos, a la que teóricamente es la cenicienta del grupo, pero que se rebeló ante el Inter de Milán en la jornada inaugural. Consiguió un valioso empate en Milán y estuvo a punto de dar la sorpresa con una victoria.

El Slavia sigue intratable en la liga checa, aunque el nivel de la competición sea inferior. En Champions, solo el Borussia Dortmund ha sido capaz de ganar en su estadio. Son de entrada un equipo valiente, en muchas ocasiones optan por realizar presión alta a la salida del balón de los rivales. Se caracterizan por ser muy generosos y muy solidarios en el trabajo sin balón, en el que todos sus efectivos, sin distinción, están prestos para defender y ayudar a sus compañeros. Un ejemplo muy claro de esto, fue el partido ante el Inter, donde los jugadores del banda del centro del campo, uno de ellos  -Olayinka- que es delantero centro, realizaron un trabajo esplendido ayudando a sus laterales en repliegues constantes.

El Slavia de Praga es un conjunto mucho mas físico que técnico, donde el talento está en cuenta gotas en las piernas de Stanciu, un futbolista rumano que es uno de los pocos que destacan en esa faceta. A esa falta de talento y también de desequilibrio individual en ataque, oponen rapidez, velocidad, agilidad y mucho esfuerzo físico. Reseñar como curiosidad y anécdota que no disponen en su once titular de ningún jugador zurdo, lo que les puede definir como un equipo poco simétrico.

ACUMULACIÓN DE HOMBRES

Es lo que suele hacer el Slavia de Praga en el centro del campo  en estos partidos de Champions su técnico Trpisovsky. Completando un 4-1-4-1, con 5 hombres en el medio para poder presionar bien por dentro. Kolar es indiscutible en portería, al igual que su defensa con Coufal y Boril como laterales y dos centrales que salen mucho a perseguir al delantero rival, contundentes en las disputas y con mucha anticipación, Kudela y Hovorka.

Realizan muchas persecuciones individuales como si se tratase de marcajes al hombre. Por delante como medio defensivo el gigantón Soucek, que se incrusta entre los centrales para dar salida de balón, bastante lento en sus movimientos. Cercano a él, está Stanciu. El rumano es su jugador más técnico y con mejor visión de juego. Les acompaña bien Traoré, que está lesionado, o bien Sevcik, mientras en las bandas está por la derecha Masopust y por la izquierda el nigeriano Olayinka, que ante el Dortmund ya jugó en banda izquierda, aunque en la jornada inaugural ante el Inter fuese el delantero referencia, autor del gol de su equipo.

Precisamente, el nigeriano puede actuar como delantero más avanzado, reforzando así su técnico el centro del campo con un jugador más físico, pero también puede mantenerlo en banda y dar entrada a Tecl, Skoda o incluso Van Buren como referente ofensivo. 

El Slavia de Praga, en definitiva, es un equipo que se encuentra mucho más cómodo con el contraataque, por la velocidad de sus hombres, pues en ataque posicional les falta creatividad ofensiva y también desborde.