Haliburton sigue en estado de gracia y los Pacers derrotan a los Bucks

Encarrilan cinco triunfos consecutivos, algo que no lograban desde noviembre de 2022

Tyrese Haliburton firmó 31 puntos y 12 asistencias

Tyrese Haliburton, hombre del partido

Tyrese Haliburton, hombre del partido / X (Twitter)

Los Indiana Pacers se impusieron este miércoles a los Milwaukee Bucks por 142-130 en un choque que quedó sentenciado en el tercer cuarto con una nueva noche mágica de Tyrese Haliburton, que firmó 31 puntos y 12 asistencias sin pérdidas de balón.

Los Pacers, que ya vencieron a Milwaukee en Año Nuevo, encarrilan cinco triunfos consecutivos, algo que no lograban desde noviembre de 2022. Además Indiana se quedó con la serie de temporada ante los Bucks. Ambos conjuntos ya han jugado sus cinco encuentros del curso en apenas 55 días con un rotundo resultado de 4-1 para Indiana.

En esta temporada, una nueva rivalidad ha nacido en la NBA con este duelo entre Pacers y Bucks. Desde la eliminación de Milwaukee en semifinales del NBA In-Season Tournament hasta la ‘desaparición’ del balón que Giannis Antetokounmpo quería llevarse a casa tras anotar 64 puntos, el choque de este miércoles engrandeció la pasión con la que ambos equipos afrontan estos partidos.

Además de Haliburton, seis jugadores completaron dobles dígitos en anotación para los locales, con 16 puntos para Bennedict Mathurin y 15 para Obi Toppin desde el banquillo más los 15 tantos de Bruce Brown y Myles Turner.

En los Bucks, tanto Antetokounmpo como Damian Lillard anotaron por debajo de sus promedios, con 26 y 23 puntos respectivamente, gracias a un excelente trabajo defensivo de Indiana. El griego rozó el triple-doble con 11 rebotes y 8 asistencias.

Turner lideró un buen arranque de partido de los Pacers con 6 de los 8 primeros puntos, dejando claro que esta vez los suyos sí podían contar con él ante el planteamiento físico que a Milwaukee le fue tan bien en los últimos choques.

Los Bucks se mantenían gracias al acierto desde el perímetro. Lillard con un triple y Malik Beasley con dos impidieron a Indiana marcar ventajas. Uno más de Khris Middleton llevó el choque al 16-16 a mitad de cuarto.

La entrada de Toppin desde el banquillo funcionó como revulsivo para conseguir otro parcial en el tramo final, con un nuevo triple y un mate que consolidaron la renta local, al finalizar el primer periodo (33-31).

Milwaukee supo aguantar el ritmo y tuvo su recompensa levantándose en el luminoso con cuatro puntos de ventaja (43-47) tras un parcial de 6-16. El juego interior era claramente el denominador común de la velada y así se explicaban los 8 puntos de Antetokounmpo y Middleton en el segundo cuarto.

En los Pacers, más de la mitad de su producción también llegaba desde cerca del aro, concretamente 36 de los 66 tantos al descanso. Mucho tuvo que ver en esto Toppin, que volvió a hacer de las suyas para neutralizar el impulso de los Bucks. Cuatro puntos suyos- mate incluido- más otra volcada de Aaron Nesmith le dieron la vuelta al luminoso.

La igualdad volvía al parqué entre dos equipos especialmente motivados y que se marcharon a los vestuarios con un ajustadísimo 66-68.

Indiana se gusta

Saltaron a la pista más concentrados los Pacers: fue un 4-0 de salida para ellos y un 10-0 posterior con triple de cierre de Haliburton que mandó a los locales 13 puntos arriba (87-74) para desesperación de Adrian Griffin desde el banquillo.

Indiana comenzó a gustarse y a reencontrarse con aquel baloncesto rápido e intenso que tan buenos resultados les ha dado esta temporada. Haliburton se lució con dos pases seguidos sin mirar en su novena y décima asistencia para que Turner cortara y se colgara del aro.

Los de Rick Carlisle vivían cómodos con esa barrera psicológica de los 10 puntos que Milwaukee no era capaz de reducir. Indiana era más agresivo y fue capaz de anular a su rival, entrando en el último cuarto con un 113-97 favorable. Era la mayor ventaja de la noche hasta el momento.

El hunidimiento del tercer cuarto afectó en exceso a los Bucks y las canastas de los Pacers eran viscerales, pasionales y contagiosas: lograban levantar al público de sus asientos y provocaban el enfado de los rivales.

Los piques entre ambos equipos fueron constantes y las opciones de victoria eran cada vez menores para los visitantes, que ya caían por 118-100 en tan solo dos minutos de cuarto.

Haliburton emuló aquel famoso triple con falta adicional que convirtió ante los Boston Celtics y que les metió en la ‘Final Four’ de la Copa de la NBA. Fue casi la estocada definitiva. Poco baloncesto y muchas revisiones arbitrales, reclamos… Todo ello dejó claro que la rivalidad entre ambas franquicias está en auge.

Haliburton le agarró el gustillo a los pases por la espalda; uno más fue la llave para un triple abierto de Turner. La fantasía continuaba y sería lo último que la estrella local haría sobre la pista. El 142-130 definitivo reflejó lo sucedido en la cancha y ambos técnicos decidieron sentar a todas sus estrellas con dos minutos aún por disputarse.