El enigmático mensaje de Pau Gasol sobre su lesión

Pau Gasol sigue con la recuperación de la lesión que sufre por estrés de su pie izquierdo, que le llevó al quirófano en mayo y le hizo impidió estar en el Mundial de China. Mientras se recupera, Pau Gasol hace ahora funciones de asistente en los Portland Trail Blazers con el objetivo de volver lo antes posible a las pistas como jugador. Su último partido oficial fue el 12 de marzo.

Ahora, con la mirada puesta en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, Pau Gasol ha escrito un artículo en el diario 'Expansión' que lleva el título de "Dejar la NBA es un choque emocional importante". En el mismo podemos encontrar referencias a su lesión.

"Soy de los que piensa que incluso de las situaciones más difíciles y dolorosas podemos sacar cosas positivas y que nos ayuden a crecer", escribe, para añadir que "en nuestra cultura, cuando un jarrón se cae y se rompe consideramos que pierde su valor. Lo solemos apartar o incluso nos desprendemos de él. Normalmente no consideramos la reparación como una opción porque, para nosotros, el objeto pierde su razón de ser. En Japón, cuando un objeto de cerámica sufre un daño o se rompe, lo reparan uniendo los trozos y rellenando las grietas con oro. Para ellos, detrás de esos pedazos existe una nueva historia que merece ser contada y ensalzada".

Ya más concretamente sobre aspectos más deportivos, Pau Gasol indica en el artículo en cuestión que "como atletas profesionales, las lesiones son algunas de las situaciones más duras a las que debemos hacer frente. Pero, si profundizamos un poco más y nos hacemos la pregunta de nuevo entenderemos que, más allá de nuestra condición profesional, somos personas y basta con mirar a nuestro alrededor para sentirnos afortunados y agradecidos por todo lo que tenemos".

Reconoce que "para mí, dejar provisionalmente la NBA supone un choque emocional importante. Sin embargo, y por muy tópico que suene, lo más importante en la vida es la salud y la calidad de lo que vivimos se deriva de ella", y concluye que "lo primero que debo aceptar es que el proceso de rehabilitación de mi pie izquierdo requiere un tiempo más largo de lo esperado, buen recordatorio de que ya no soy ningún chavalín; y en esto es precisamente en lo que me centro".