Busquets asume galones

Jordi Gil / David Rubio

España tiene muy cerca los octavos de final en un camino que se inició muy accidentado con el fichaje de  Lopetegui por el Real Madrid y que ha seguido con Fernando Hierro salvando los muebles como ha podido. Las adversidades a menudo hacen crecer a los equipos y Sergio Busquets es uno de los componentes del equipo que contempla este amplio margen de mejora. Está disputando su tercer Mundial y su experiencia le guía a pensar que la selección puede dar mucho que hablar en la cita de Rusia.

Busquets realizó un profundo análisis de los dos primeros partidos, ante Irán y Portugal, nada más acabar el encuentro frente a los persas. El de Badia considera que en estos encuentros era fundamental ser prácticos. En especial, Sergio  recalcó que frente a Irán “se  tenían que sumar los tres puntos como fuera. Empezamos el partido  por debajo de Irán y Portugal y estos resultados nos exigían mucho. Supimos resolver una situación complicada”.

El peligro de las transiciones

En  estos encuentros, la selección ha repetido fases de juego asociativo de buen nivel con desapariciones que han costado ocasiones para los rivales.  Busquets se mostró consciente de este escenario y admitió que “cuando nos equivocamos, nos enganchan a la contra”, Los rivales están repitiendo una fórmula puntualmente de  “apretar arriba y a la que fallas un pase o te despistas, lo aprovechan”.

España está  trabajando para que no se produzcan estas desconexiones y Busquets no se fía de la mala clasificación de Marruecos, ya eliminado, porque considera que “es la selección que mejor ha jugado del grupo, aunque los resultados no hayan sido buenos”.

Los defectos están definidos, pero también las virtudes. Disponer del balón es básico  para crear peligro, si bien Sergio matizó que “también es importante tener la posesión atacando, como hicimos en el inicio  del segundo tiempo ante Irán cuando marcamos el gol”.

Portería a cero

Los jugadores saben la receta que pasa "por mover rápido el balón” y sacar rédito “del desgaste  que al final pueda tener el rival”, algo que obliga a un alto nivel de  concentración. España necesita  un equilibrado funcionamiento colectivo en el que también pasa “mantener la portería a cero”.

Busquets no olvida cómo ganó el campeonato del Mundo en Sudáfrica sin encajar un solo gol en las eliminatorias una vez superada la fase de grupos. Un aspecto que también recalcó Fernando Hierro tras  el estreno ante Portugal. Los tres goles de los lusos hicieron daño, ni que llegaran por circunstancias extrañas.

Motivación por el Mundial

Uno de los handicaps tradicionales del equipo español es el agotamiento de muchos de sus jugadores  por las duras temporada en sus clubs. Sergio no es ajeno a este factor, aunque entonces  es cuando entra el factor mental para superar las adversidades. La motivación debe poder con todo:  “Cuando hay un Mundial, el cansancio o los minutos quedan al margen”, destacó.

A nivel personal, Busquets comentó que su rendimiento, al igual que el de todos, dependerá de cómo el bloque pueda actuar. “Al final estoy como el equipo, cuando estamos metidos, vamos muy bien. Sufrimos cuando tenemos pérdidas y nos hacen transiciones”. 

El centrocampista blaugrana entiende que las carencias mostradas tampoco son irreparables y, incluso, cree que España debería tener una clasificación mejor en el Grupo B: “Merecimos más en el primer partido  ante Portugal y en el segundo, sin estar brillantes porque le rival no lo permitía, ganamos”.

Aviso sobre Marruecos

Aunque España tiene la clasificación prácticamente en el bolsillo y con un punto bastará de forma matemática en la última jornada, Busquets fue muy reiterativo en su mensaje de aviso sobre Marruecos: “No ha tenido la fortuna de dominar las áreas y está en casa, pero a nivel de juego ha sido la mejor de las cuatro.”

Sergio se aferra a la idea de no relajarse lo más mínimo y dar el máximo, pese a medirse a un rival que ya no se jugará nada. El de Badía tuvo que sobreponerse al inicio de la concentración mundialista a una fuerte gastroenteritis, “que no sé cuantos kilos me hizo perder”, y aunque deba  poner el cuerpo al límite, mostró como siempre su máxima implicación. “No estoy para dar y regala. Intento recuperar lo mejor posible y me encuentro bien físicamente”, apuntó.

Su análisis volvió a centrarse en este punto en el factor mental y en las fuerzas que te añade la oportunidad única para muchos futbolistas  de disputar una Copa del Mundo. “Al final, cuando empieza a rodar el balón, la ilusión y ganas de ganar lo cambia todo. El Mundial es difícil, lo pasas todo y hay que saber sufrir”.

Conclusión positiva

España cuenta con la experiencia reciente del éxito. Busquets fue uno del los grandes artífices de la estrella conquista en el Soccer City en 2010 ante Holanda en una trayectoria muy ajustada.  El futbolista subrayó “la madurez que requiere cada partido” y saber interpretar muy bien los partidos.

Sergio es un maestro en la lectura de los partidos. “En  general estamos bien”, fue su conclusión. Un optimismo basado en la sensación que el equipo debe ir a más y que no hay ningún rival que tampoco esté pasando por encima de los demás.