El 'tridente B' del PSG se reivindica

El 'Fideo' Di María se le atragantó al Real Madrid

El 'Fideo' Di María se le atragantó al Real Madrid / AFP

Roger Payró

Pintaban bastos la puesta en marcha del PSG en Europa. El conjunto parisino tenía que bailar con la más fea en su estreno en la fase de grupos y lo hacía sin su tridente de gala. Sin embargo, ahí estaban Di María, Icardi y Sarabia para dar un golpe sobre la mesa. Especialmente los extremos, con un Di María sobresaliente, hicieron que la zaga del Real Madrid estuviera inmersa en una pesadilla durante los noventa minutos. Los tres serían titulares en la mayoría de equipos de las grandes ligas europeas pero en París están relegados a un papel más secundario, que no menos importante. Son estas cosas que tiene poseer un multimillonario proyecto como el de Nasser Al-Khelaïfi. Pero el ‘tridente B’ pide sitio.

El 3-0 que el conjunto de Thomas Tuchel asestó al Real Madrid fue incluso corto por los méritos de unos y otros. Y es que el ‘Fideo’ Di María se le atragantó a los de Zidane. El exmadridista se reivindicó ante un club del que se fue por la puerta de atrás y se erigió como el gran protagonista con su doblete, lo que le convirtió en el segundo futbolista de la historia en lograr marcarle dos goles a Real Madrid y Barcelona en Champions League tras Mário Jardel. Di María lo hizo además en sus dos primeros disparos, pero es que no necesitó más.

Ángel se convirtió en demonio para convertir sus constantes movimientos en un quebradero de cabeza para Zidane, que no sabía qué ordenar sus pupilos para pararle. Sus constantes combinaciones con Juan Bernat, un socio de oro en el carril izquierdo y que cuajó un partido excelente, volvieron loco a un Carvajal demasiado revolucionado y que encima acabó maniatado en ataque. Di María ya suma cinco goles en siete duelos esta temporada y tres dobletes en lo que va de 2019. Pocos aprovechan los minutos como él.

Sarabia hace méritos

Quien tampoco se quedó corto fue el homólogo del argentino en banda derecha. Pablo Sarabia salió este pasado verano del Sevilla precisamente para tener oportunidades de disfrutar de una noche como la del miércoles. Beneficiado por las mencionadas ausencias del equipo en ataque, el madrileño está siendo una pieza indiscutible para Tuchel en este inicio de curso. El extremo español solo está acumulando méritos para no salir del once, pero la realidad es que cuando estén todos disponibles el peso de unos y otros le relegaría al banquillo. Bendito problema para el técnico alemán.

El otro aspirante para hacerse un hueco en la alineación es Mauro Icardi, y aunque el del miércoles era su segundo partido en las filas del PSG y el primero como titular, dejó detalles interesantes. Cavani es el titular y si bien es el que menos ha podido demostrar del ‘tridente B’, el uruguayo no debería relajarse porque de los tres de arriba es el más prescindible. E Icardi no desaprovechará sus oportunidades. En París se las prometen felices con tanto talento.