El PSG endosa la primera derrota a Robert Moreno

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Mbappé abrió la lata. / AFP

Arnau Montserrat

Segundas partes nunca fueron buenas. O eso dicen. En el caso del Mónaco de Robert Moreno se cumplió a la perfección. Si en el Parque de los Príncipes brillaron para acabar llevándose un meritorio empate, en casa tres días después cedieron ante la efectividad del PSG. La principal diferencia entre los dos conjuntos en el Louis II.

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Ligue 1

1
4
Alineaciones
Mónaco
Lecomte, Henrichs, Glik, Maripan, Ballo-Touré, Bakayoko, Gelson Martins (Augustin 78'), Fàbregas (Jovetic 79'), Golovin (Adrien Silva 69'), Keita Baldé, Ben Yedder.
PSG
Navas; Silva, Kimpembe, Dagba, Kurzawa; Gueye (Verratti 71'), Kouassi; Di María (Draxler 79'), Icardi (Sarabia 71'), Neymar, Mbappé.

Los primeros 20 minutos de partido fueron más un partido de ping pong que uno de fútbol. Idas y venidas constantes con hasta cinco remates entre los dos conjunto en los primeros cinco minutos de partido. Menos mal de Lecomte y Keylor que sostenían el partido roto que se presentó en el Principado.

Pero el desequilibro de Neymar y la capacidad goleadora de Mbappé no los tienen en Mónaco y eso acabó desequilibrando el partido. Si iban a golpes poco tenían que hacer los locales que vieron como Di María se inventaba un caramelo para Kylian que en el uno contra uno no perdonó para poner el primero en el minuto 22.

Tuvo que ser revisado por un VAR que se fue de vacaciones cuando el colegiado señaló penalti de Glik sobre Kurzawa que era en primera instancia parecía claro como una catedral pero que vista la repetición era de todo menos penalti. Neymar lo aprovechó para poner el 0-2 justo en el tiempo añadido antes del descanso. Un golpe moral demasiado duro.

El PSG empeoró en la circulación y en la presión tras pérdida en la segunda mitad y el Mónaco tuvo alguna que otra ocasión para acortar distancias. Pero si la pólvora está mojada el PSG te acaba matando en una de las suyas. Sarabia, que hacía segundos que estaba sobre el verde, marcó el tercero pese a que el asistente levantó el banderín. Menos mal que remató a gol porque estaba más que habilitado. El VAR, ahora sí, rectificó la decisión y dio por válido el gol.

Solo una salida en falso de Keylor a cinco minutos para el final abrió el camino del gol al Mónaco. Lo hizo Bakayoko. Era ya demasiado tarde y además Mbappé estaba para cerrar el partido. Nuevo doblete del francés a asistencia de Neymar.