Campaña cuesta 30 millones de euros

Uno de los mejores jugadores del Levante, José Campaña, está en boca de todos. No ya por su reciente debut con la selección española, sino porque puede convertirse en las próximas semanas en jugador del Atlético de Madrid.

Pese a que el mercado echó el cierre el pasado 5 de octubre, el hecho de que el Arsenal se llevara a Thomas Partey del cuadro colchonero el último día de la ventana de pases abonando su cláusula de 50 millones de euros permite a los rojiblancos fichar hasta el próximo 5 de noviembre, siempre y cuando el jugador incorporado juegue en su misma liga o se encuentre sin equipo. Y Simeone tiene al centrocampista granota entre ceja y ceja.

Campaña tiene una cláusula de rescisión de 60 millones de euros, pero el presidente del Levante, Quico Catalán, admitió a ‘Radio Marca’ que lo traspasaría por la mitad de esa cantidad. “Si viene el Atlético ahora me sentaría a negociar. Pero nunca lo vendería por menos de 30 millones”, explicó el máximo mandatario del club granota, dejando abierta la puerta de salida a un jugador que ya expresó públicamente su deseo de dar un salto deportivo en cuanto apareció el interés del Atlético de Madrid.

Decisión entendible

Catalán aseguró que ve normal que Campaña quiera dar un paso adelante en su carrera. “Veo natural que Campaña quiera crecer. Me lo ha dicho a la cara en mi despacho. Pero su comportamiento aquí es ejemplar”. El canterano del Sevilla cumple su quinto curso en el Levante tras una carrera en la que ha pasado por Inglaterra (Crystal Palace), Alemania (Nürenberg), Italia (Sampdoria) y Portugal (Oporto).

Pese a encontrar su sitio en el Ciutat de València tal y como él mismo ha reconocido, a nadie le amarga un dulce y, con el Atlético de Madrid como pretendiente, desea seguir progresando. “No me importa que Campaña traslade públicamente sus ganas de salir. Es normal que José, con su edad y potencial, quiera jugar la Champions y pelear por títulos. Pero como todo está hablado, no hay ningún problema”, espetó Catalán sobre el interés rojiblanco en el andaluz, cuya salida ya tiene precio.

Ahora solo falta que la dirección deportiva colchonera esté dispuesta a abonar los 30 millones de euros con los que ha sido valorado el jugador. El Levante, el club donde es feliz y ha recuperado la sonrisa, está dispuesto a dejarlo volar.